El último día, el sábado 27 de abril de 2024, los candidatos al bautismo fueron atendidos por 18 pastores. Entre ellos, Christine había roto con su antigua vida para seguir a Jesucristo. “La esclavitud y los obstáculos habían durado demasiado”, dijo. Entró en uno de los tres bautisterios de madera construidos para la ocasión.
Hacia el final de la ceremonia, numerosos asistentes aceptaron los repetidos llamados al bautismo del pastor Sessou Selom, secretario de la División Africana Centro-Occidental.
Cuatro mujeres se enfrentaron a espíritus hostiles durante su bautismo. Tres fueron liberadas rápidamente de estas influencias malévolas en el nombre de Jesús. La cuarta necesitó una sesión de oraciones de liberación fuera del agua antes de ser liberada. Según el pastor Kra Emmanuel, director de evangelización de la DAO, “este fenómeno es común en Benín”.
El pastor Djossou Komlan Adjéoda Simon, presidente de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en el Sahel Oriental y predicador en Segbeya, uno de los tres lugares de Cotonú, destacó la importancia del suceso, señalando que “Hêvié es un centro mundial del vudú, que atrae a seguidores de todo el mundo en busca de poder. Es una localidad profundamente temida y arraigada en los ritos y prácticas del vudú”.
El impacto de la campaña se dejó sentir mucho más allá de los bautismos. Se recogieron y destruyeron objetos vudú, símbolo de la renuncia de los nuevos conversos a sus antiguas creencias. La conmovedora historia de Ella, una mujer que lloró de alegría al dejar atrás su vida pasada, ilustra la profunda transformación experimentada por los participantes.
Muchos señalaron que ver a estos hombres, mujeres y niños experimentar la verdadera vida por primera vez era un espectáculo hermoso. Fue maravilloso para los miembros de la iglesia de Benín vivir momentos tan intensos de alegría por una cosecha tan hermosa.
Estos momentos de conversión y celebración quedaron plasmados en las palabras del pastor Moorooven, quien, basándose en los primeros capítulos del Evangelio según San Juan, aseguró a los neófitos una vida abundante en Jesús, que satisface todas las necesidades, ya sean materiales, espirituales, emocionales o físicas.
La campaña se vio realzada por la presencia de varios oradores. Bollet Nestor, de la DAO, estuvo en Porto Novo; Baka Able Paul, director de Evangelismo de la Unión del Sahel Oriental, estuvo en el sitio de Womey, en Cotonú; Djossou Komlan Adjéoda Simon estuvo en el sitio de Segbeya, en Cotonú.
El mismo fervor animó a pequeños grupos en Costa de Marfil, Burkina Faso, Níger y Togo, con un total de 405 bautismos.
Paralelamente, Alfred Asiem, director de Jóvenes de la DAO, organizó un consejo de jóvenes que culminó con un concierto de música cristiana el domingo 28 de abril, marcando la transición a la nueva vida de los conversos.
El impacto de esta misión se vio reforzado por el anuncio de una donación de 35.000 dólares de la Asociación General para la construcción de una iglesia en Hêvié, Cotonú, señal tangible del compromiso permanente de la iglesia en la región. Según el pastor Djossou, “ya se ha adquirido una parcela y en seis meses se abrirá y organizará la nueva iglesia”.
Con más de 7.000 miembros repartidos en 38 iglesias y 57 grupos, la Asociación de Benín ve en estos acontecimientos un poderoso vector de crecimiento espiritual y comunitario, que insufla nueva vida a la fe en la región.
El artículo original se publicó en el sitio web de la División Africana Centro-Occidental.