Un equipo de arqueólogos, formado por estudiantes y empleados de la Southern Adventist University (SAU) y de la Universidad Hebrea de Jerusalén descubrió un peine para el pelo con trascendencia lingüística. Descubierto en Tel Laquis, en Israel, durante una excavación en 2016, el peine presenta la primera frase alfabética completa alguna vez descubierta. Fue escrita en la lengua cananea, que es la predecesora de todos los alfabetos modernos.
El alfabeto se inventó hacia el año 1800 a.C., y fue utilizado por los cananeos y, posteriormente, por la mayoría de las lenguas del mundo. Hasta hace poco, no se habían descubierto inscripciones cananeas significativas, salvo dos o tres palabras aquí y allá. Ahora, un asombroso descubrimiento presenta una frase entera en cananeo alfabético, que data de alrededor del 1700 a.C. Está grabado en un pequeño peine de marfil e incluye un deseo contra los piojos.
“El hallazgo no puede ser sobrevalorado. La invención del alfabeto fue la contribución más importante a la comunicación en los últimos cuatro milenios”, dijo Michael G. Hasel, profesor de Arqueología de la SAU y codirector de las excavaciones de Laquis con el profesor Martin G. Kilingbeil, y el profesor de la Universidad Hebrea de Jerusalén Yosef Garfinkel. “Antes de esta época, los complicados sistemas de escritura de Egipto y Mesopotamia limitaban la alfabetización. Hoy en día, la mayor parte del mundo construye frases utilizando el alfabeto que se encuentra en este peine de hace 3.700 años. Esta es la primera frase verbal que utiliza el alfabeto, que alguna vez se haya encontrado”.
El peine de marfil es pequeño, mide aproximadamente 3,5 por 2,5 centímetros, con dientes en ambos lados. Aunque sus bases aún son visibles, los dientes del peine se rompieron en la antigüedad. La parte central del peine está algo desgastada, posiblemente por la presión de los dedos que sujetan el peine durante el cuidado del cabello o la eliminación de los piojos. El lado del peine con seis dientes gruesos se utilizaba para desenredar los nudos del cabello, mientras que el otro lado, con 14 dientes finos, se utilizaba para eliminar los piojos y sus liendres, de forma muy parecida a los actuales peines de despioje de dos lados que se venden en las tiendas.
“Cuando encontramos el peine el primer día de excavación en 2016, la inscripción no se veía debido a la incrustación de suciedad”, dijo Katherine Helser, graduada en 2019 de la SU, y en cuya área de trabajo se produjo el hallazgo.
Los antiguos peines estaban hechos de madera, hueso o marfil. El marfil era un material muy caro, y probablemente constituía un objeto de lujo importado. Como en esa época no había elefantes en Canaán, es probable que el peine procediera del cercano Egipto, lo que indica que incluso la gente de un nivel social elevado sufría de piojos.
Los colegas de la Universidad Hebrea de Jerusalén analizaron el peine para detectar la presencia de piojos con un microscopio, y tomaron fotografías de ambos lados. En el segundo diente se encontraron restos de piojos de 0,5 a 0,6 milímetros. Sin embargo, las condiciones climáticas de Laquis no permitieron que se conserven los piojos intactos, sino solo la membrana externa de quitina del piojo en su fase de ninfa.
El descubrimiento de la escritura en el peine no se produjo hasta 2022, cuando la Dra. Madeleine Mumcuoglu fotografiaba el objeto bajo una luz especial. La inscripción fue descifrada por el epigrafista semítico Daniel Vainstub de la Universidad Ben Gurion. Los hallazgos de la expedición en conjunto entre la Universidad Hebrea y la SAU se publicaron en la Jerusalem Journal of Archaeology [Revista Arqueológica de Jerusalén].
Hay 17 letras cananeas en el peine. Su forma es arcaica, de la primera etapa de invención de la escritura alfabética. Forman siete palabras en cananeo, que dicen: “Que este colmillo elimine los piojos del pelo y de la barba”.
A pesar de su pequeño tamaño, la inscripción en el peine de Laquis tiene características muy especiales, algunas de las cuales son únicas y llenan las lagunas de conocimiento de muchos aspectos de la cultura de Canaán en la Edad del Bronce. Por primera vez, los investigadores disponen de una frase verbal completa escrita en el dialecto que hablaban los habitantes cananeos de Laquis, lo que les permite comparar esta lengua en todos sus aspectos con sus otras fuentes.
En segundo lugar, la inscripción del peine arroja luz sobre algunos aspectos de la vida cotidiana de la época, hasta ahora poco atestiguados: el cuidado del cabello y el tratamiento de los piojos.
En tercer lugar, se trata del primer descubrimiento en la región de una inscripción que hace referencia a la finalidad del objeto en el que fue escrita, a diferencia de las inscripciones de dedicación o propiedad en los objetos.
Por último, la habilidad del tallador para grabar con éxito unas letras tan diminutas (de 1 a 3 milímetros de ancho) es un hecho que, a partir de ahora, debería tenerse en cuenta en cualquier intento de sacar conclusiones sobre la alfabetización en Canaán en la Edad del Bronce.
El alfabeto cananeo es el mismo utilizado en el hebreo escrito de los primeros libros de la Biblia. La inscripción en el peine data el alfabeto en una época anterior a que existieran los escritores bíblicos y confirma que la escritura alfabética era de uso cotidiano en las ciudades que posteriormente ocuparon los israelitas.
Laquis fue una importante ciudad-estado cananea en el segundo milenio a.C. y la segunda ciudad más importante del reino bíblico de Judá. El 30 de enero de 2023, la SAU inaugurará una gran exposición en su Museo Arqueológico Lynn H. Wood, titulada: “Paz y guerra: La conquista asiria de Laquis”, que destacará importantes descubrimientos de las excavaciones que patrocinaron en Laquis entre 2013 y 2017.
El artículo original se publicó en el sitio web de la Southern Adventist University.