“Me encanta ser adventista. Y creo que necesitamos crear una cultura en la que [más] jóvenes amen ser adventistas”, dijo Daniel Fukuda, copresidente del Foro de Estudiantes del Seminario (FES) de la Universidad Andrews, durante un reciente consejo de líderes estudiantiles de la División Norteamericana (DNA).

El miércoles 25 de enero de 2023, un grupo comprometido de 27 líderes estudiantiles de pregrado y posgrado, directores de jóvenes a nivel de unión y líderes de la DNA se reunieron vía Zoom para analizar lo que los jóvenes necesitan para sentirse parte de la vida y el liderazgo de la iglesi, y cómo la DNA puede apoyarlos mejor.

Esta reunión tuvo una agenda abierta, que fue intencional. “Queremos empoderar y equipar a los estudiantes, [por lo que] es más importante para nosotros escuchar de ellos lo que está pasando en su vida que descargar en ellos lo que está pasando con nosotros”, dijo Tracy Wood, directora del Ministerio Joven y del Adulto Joven de la DNA.

G. Alexander Bryant, presidente de la DNA, quien se conectó desde el aeropuerto internacional de Los Ángeles mientras estaba de viaje, concordó con esta aproximación: “Realmente aprecio la oportunidad de entablar conversación con ellos, pero sobre todo de escuchar”.

Entre los temas significativos que surgieron del diálogo de 90 minutos se incluyeron la tutoría de jóvenes que se sentían llamados a la administración eclesiástica y el apoyo espiritual a estudiantes universitarios.

Antes de la pandemia, los jóvenes adultos formaban parte la junta directiva de la DNA y asistían al concilio anual de fin de año de la DNA (CADNA) para participar en debates sobre la misión de la iglesia. En 2021, la junta directiva de la DNA se redujo, y las vacantes para estudiantes universitarios, junto con las de los directores asociados de la DNA, no se mantuvieron. Sin embargo, la DNA no quería perder las perspectivas de los líderes estudiantiles universitarios, por lo que Wood, Bryant y Wendy Eberhardt, vicepresidenta de ministerios de la DNA, crearon el consejo de líderes estudiantiles universitarios. Esta reunión consultiva ofrece a los estudiantes algo más que una única reunión anual; ahora se ha ampliado a tres reuniones en línea al año. Además, incluye a más líderes estudiantiles y ofrece a los participantes interacción directa con el presidente de la DNA, el vicepresidente de ministerios y los directores del Ministerio Joven y del Adulto Joven.

En la reunión del 1° de octubre de 2022, la primera reunión consultiva, que sirvió como precursora del CADNA, los estudiantes adelantaron cuestiones que la junta directiva de la DNA debatiría con respecto a educación, iglesias en línea y un mejor uso de los datos de eAdventist.

Para todas las reuniones celebradas hasta ahora, Wood ha invitado a líderes de cinco redes: Responsables de asociaciones de estudiantes de la Comunidad Cristiana Adventista (CCA); estudiantes que trabajan en el departamento del Ministerio en Campus Universitarios Públicos; presidentes de asociaciones de estudiantes de universidades adventistas; responsables del Foro de Estudiantes del Seminario (FES); y responsables de universidades con asociaciones de estudiantes de posgrado. También se invitó a los directores del Ministerio Joven y del Joven Adulto, y de los ministerios universitarios en el ámbito de las uniones.

Entre los representantes de la DNA en enero se encontraban Wood, Bryant y Gordon Bietz, quien, aunque jubilado, trabaja a tiempo parcial como director asociado de Educación Superior. A continuación, se ofrece un resumen de los principales temas que los líderes estudiantiles presentaron en la reunión más reciente:

MENTORÍA DE FUTUROS LÍDERES

Varios líderes estudiantiles, en su mayoría de las generaciones Z y Milenial, indicaron el interés de sus generaciones en ayudar a dar forma al futuro de la iglesia y el deseo de mentores que los preparen para asumir la administración y otras funciones de liderazgo. Ofrecieron varias ideas para la mentoría en toda la división, incluyendo:

• Un programa en el que los administradores de cada asociación y unión y de la División tengan pasantes de diferentes generaciones: escuela secundaria, universidad, jóvenes de en sus 20, 30 y 40 años.

• Diálogo regular entre los oficiales electos y los estudiantes vía Zoom, si no es posible el seguimiento y la mentoría en persona.

• Un sistema de acompañamiento y mentoría como el de la Universidad AdventHealth (UAH) para estudiantes de Enfermería, en el que los estudiantes acompañan inicialmente a la enfermera y, a continuación, la enfermera acompaña al estudiante, lo que fomenta la competencia y la confianza.

• Tutoría para estudiantes que quieren trabajar para la Iglesia en diversos campos.

David Springer, presidente de la Asociación de Estudiantes de Posgrado de la Universidad Andrews, ofreció otra perspectiva: “Tenemos que sentirnos vinculados a la actual y futura generación de administradores. Si no, muchos seguirán sintiendo que la iglesia no tiene un espacio para ellos”.

Los líderes de la DNA afirmaron estas recomendaciones, señalando que, aunque un programa intensivo y formal de mentoría con los administradores sería un reto logístico, la mentoría de alguna forma es esencial para la longevidad de la iglesia. Esto es particularmente cierto, ya que más del 50 % de los pastores adventistas y el 65 % de los administradores de todos los niveles están en edad de jubilación o pronto lo estarán. Bryant también habló de la mentoría como un enfoque estratégico de la DNA, con planes para crear más estructura en torno a ella.

Greg Taylor, director del Ministerio Joven y del Joven Adulto de la Unión del Sur, relató sus dificultades para responder a un estudiante universitario que preguntaba cómo llegar a ser director de jóvenes de una asociación. “Agradezco esta conversación, porque también he estado meditando en ello. Creo que podemos hacer mejor tarea con el fin de allanar el camino para aquellos que reconocen [sus dones administrativos]”.

APOYO ESPIRITUAL A LOS ESTUDIANTES

El apoyo al desarrollo espiritual de los estudiantes fue otro tema central. Los asistentes hablaron de la falta de alimento espiritual en el aula y en la iglesia local. Por ejemplo, aunque los estudiantes aprecian cuando se ora al comienzo de la clase, buscan una mayor integración de la fe y la enseñanza en el aula.

Los líderes estudiantiles también expresaron que, a nivel de la iglesia local, ellos y sus compañeros anhelaban conexiones espirituales más profundas y cohesión en las enseñanzas bíblicas presentadas. Uno de ellos dijo: “[Muchos] están alimentando a los jóvenes y jóvenes adultos con comida para bebés... pero ahora necesitamos alimento sólido”.

Los participantes también señalaron que las iglesias locales deben estar más unidas en su apoyo a los estudiantes. “Los jóvenes, especialmente los estudiantes internacionales o los que están lejos de casa, necesitan una comunidad, un lugar donde puedan adorar a Dios y no [sentirse] solos”, expresó un líder.

Estos comentarios suscitaron un animado debate con respecto cómo pueden las iglesias atender mejor las necesidades espirituales y sociales de los jóvenes. Chris Langston, coordinador asociado académico del FES y pastor local, animó a los líderes estudiantiles que expresaron estas preocupaciones a ayudar a construir la iglesia que anhelan. “Cuando se trata de consistencia teológica, unidad en el trabajo que hacemos como iglesia, en y nuestra comunidade y alrededor de ella [...] no creo que haya un pastor en la DNA que no grite: ‘Alabado sea Dios’ que jóvenes como ustedes quieran ver que eso suceda. Pero no pueden hacerlo solos. Quiero animarlos a que den un paso al frente. La iglesia local necesita gente exactamente como ustedes”.

Israel Ramos, representante del Ministerio en Campus Universitarios Públicos de la Unión del Lago, aconsejó: “Cada miembro forma la iglesia. Así que hazte miembro de tu iglesia local, forma parte de la junta, demuestra que eres digno de confianza. Y poco a poco, podrás influir, usando tu voz –como hoy– y tu influencia”.

A medida que se desarrollaba el debate, los líderes estudiantiles de toda la DNA se compadecían de la complejidad de las cuestiones que otros habían planteado. Henry McNeily III, exoficial del FES, rebatió que no todas las iglesias son acogedoras y están abiertas al aporte de los jóvenes. Afirmó: “¿Por qué querría formar parte de una iglesia que no tiene interés en escuchar lo que tengo que decir, donde no puedo relacionarme con ellos, o ni siquiera son acogedores? [Busquemos] otras formas de salvar esa distancia”. Kearabetswa (KB) Mokoene, líder de la CCA, añadió que no todos los jóvenes son lo bastante valientes como para entrar en una iglesia y ofrecer sus servicios; por eso, las iglesias necesitan formación y preparación para acogerlos e integrarlos.

Kayla Goodman, cosecretaria del FES, concluyó desde su experiencia como pastora y joven en la iglesia: “[Estos temas] no van a cambiar de la noche a la mañana. Pero es ese proceso de seguir siendo escuchados como jóvenes adultos y aparecer incluso si la asociación o la iglesia local no nos ve allí”.

UN PASO ADELANTE

Otros temas que surgieron fueron la necesidad de más recursos para el ministerio en campus universitarios públicos, bajo el paraguas de la Comunidad Cristiana Adventista (CCA); la educación financiera para los futuros o actuales pastores y otros obreros de la iglesia; y cómo la DNA abordará la escasez de maestros de educación primaria y secundaria.

Fue una reunión honesta, en la que estudiantes, directores de jóvenes y líderes de la DNA reconocieron, como dijo Bryant: “Nuestra iglesia no es perfecta”.

Sin embargo, McNeily expresó el sentimiento compartido por todos, cuando dijo que, a pesar de las deficiencias, “amo la iglesia, y no me voy a ir a ningún otro lado”.

Los numerosos “gracias” de los líderes estudiantiles en el chat indicaron que el debate fue bien recibido. Y los líderes de la DNA consideraron que habían adquirido una valiosa perspectiva de los desafíos a los que se enfrentan los jóvenes adultos, en particular los que quieren liderar la Iglesia; era un paso necesario hacia un cambio positivo.

“Siempre me siento honrado y entusiasmado de formar parte de este grupo, de recoger sus ideas y su pasión por Dios y por la Iglesia”, declaró Bryant tras la reunión.

¿QUÉ SIGUE?

Al terminar la reunión, Wood dijo: “Lo que han compartido con nosotros esta noche es enorme para nosotros como líderes y administradores. Sus ideas y pensamientos llegarán muy lejos en nuestros círculos de influencia. Muchas gracias por su tiempo hoy”.

Hasta la fecha, Wood y Bryant han compartido las informaciones recibidas el 25 de enero en reuniones con los nuevos presidentes de unión, todos los presidentes de asociación y los líderes de jóvenes y jóvenes adultos de toda la División. También se compartirá mediante las publicaciones de la DNA.

En la reunión del 5 de abril se hablará de la transición de los líderes estudiantiles al final del año escolar y de cómo los líderes de la DNA pueden mantenerse en contacto con ellos.

Wood concluyó: “Hoy, [hemos hablado] acerca del anhelo de encontrar un lugar donde encajar como persona joven, una familia de la iglesia que sea profundamente espiritual y fortalecedora. Todos llevamos ese anhelo dentro... a cualquier edad. Te escuchamos y lo entendemos. También sabemos que somos un pueblo quebrantado y una iglesia quebrantada. Sin embargo, Dios nos llama a elevarnos, a fortalecernos mutuamente y a ser influencias poderosas por medio del derramamiento del Espíritu. Somos hermanos y hermanas que se esfuerzan por fortalecer a los administradores de toda Norteamérica y del otro lado de la calle. Estamos juntos en esto”.

La versión original de esta noticia se publicó en el sitio web de la División Norteamericana.