South American Division

Niña es promotora de Nuevo Tiempo y se propone alcanzar 50 estudiantes de la Biblia

Tiffany Seclen capta a personas para incentivarlas a escuchar Radio Nuevo Tiempo e invitarlas a estudiar la Biblia en un Espacio Nuevo Tiempo

Tiffany Seclen, promotora de Nuevo Tiempo. [Foto: Archivo personal]

Tiffany Seclen, promotora de Nuevo Tiempo. [Foto: Archivo personal]

A sus cortos diez años de edad, Tiffany Seclen se ha convertido en una promotora de Nuevo Tiempo Perú, motivando a las personas no solo a escuchar la radio, sino a conocer a Cristo por medio de un estudio bíblico que ofrece el medio de comunicación adventista.

“La Biblia dice que tenemos que ir y hacer discípulos, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo; y yo había sido bautizada. Entonces solicité un curso bíblico para compartirlo con otras personas”, recuerda Tiffany.

En la ciudad de Bagua (ubicada al norte del Perú) viene enseñando cursos como “La cura del Pecado”, “Educación Financiera a la luz de la Biblia” y “¿Dios me oye?” a sus amigas del colegio y vecinos. “Ahora estoy estudiando la Biblia con cinco personas y ya casi llego a 10; pero mi meta es 50”, señala la pequeña promotora de Nuevo Tiempo.

Comenta que, desde muy niña su bisabuela le enseñó a dar estudios bíblicos y eso ella lo tiene muy presente. “Primero los saludo, luego les hablo del contenido del curso y si veo que esa persona tiene interés en estudiarlo, entonces le hago la invitación al Espacio Nuevo Tiempo”, afirma Tiffany que, con un dominio en la conversación y convicción al hablar, demuestra autoridad en sus palabras.

Y aunque los temas de estos estudios parecieran complejos para su edad, ella los estudia con mucha dedicación y oración a fin de que sus estudiantes entiendan de la mejor manera, finalmente, ella ha decidido ser un instrumento en las manos de Dios para llevar más personas a sus pies.

“No importa la edad que tengas, sino que tú tengas la disposición de compartir las buenas nuevas de salvación”, es su llamado para dejar los prejuicios y temores, para hablar a otros del amor de Dios.

El artículo original se publicó en el sitio web en español de la División Sudamericana.

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