El sábado 16 de julio tuvo lugar un acontecimiento especial en la ciudad de Novokuznetsk, a orillas del río Tom: Dos hermanas, Yulia y Natalya, aceptaron al Señor Jesucristo como su Salvador personal e hicieron un pacto con Dios a través del bautismo. Cada una de ellas tuvo su propio camino especial hacia Jesús. Y ahora han tomado la decisión de seguirle, dejando sus vidas de pecado en el pasado. Dieron testimonio de ello, no sólo ante la gente, sino también ante las huestes celestiales, habiendo entrado en las aguas del río Tom.
El rito del bautismo fue realizado por el pastor de la comunidad de Novokuznetsk, Ivan Stepanovich Sobor. Tras el bautismo, se organizó una cena festiva a orillas del río, durante la cual los hermanos y hermanas compartieron sus experiencias de vida cristiana, recordaron sus caminos hacia Dios y se alegraron de que dos nuevas hermanas se unieran a su familia eclesiástica.