El Departamento de Jóvenes Adventistas de la Misión de Sri Lanka (MSL) organizó un Camporí de Conquistadores y Aventureros para toda la Misión en el Colegio y Seminario Adventista Lakpahana, Mailapitiya, del 13 al 16 de septiembre de 2024, bajo el lema “De regreso al santuario”.
“Más de 350 acampantes se inscribieron para el evento, y con el personal y los visitantes incluidos, la asistencia total llegó a casi 400, convirtiéndolo en el mayor campamento de Conquistadores en Sri Lanka en una década.
Este Camporí marcó un hito importante para la Misión de Sri Lanka, ya que fue el primer campamento de Conquistadores en siete años y el primer campamento de Aventureros en 19 años. Choi HoYoung, director de Jóvenes de la División Norasiática del Pacífico (DNAP), fue el invitado principal y orador del sermón del sábado. También asistieron Jung HyoSu, presidente; E. A. R. K. Emerson, secretario; y Anthony Francis, tesorero de la Misión de Sri Lanka.
El lema, “De regreso al santuario”, cobró vida por medio de una maqueta del santuario, donde los Conquistadores exploraron y aprendieron sobre su significado. Una búsqueda del tesoro centrada en la historia de la Iglesia permitió a los participantes aprender sobre figuras y acontecimientos clave que dieron forma al movimiento adventista.
Una semana antes del campamento se celebró el Día de los Conquistadores, durante el cual dos personas fueron bautizadas después del servicio divino. A lo largo del Camporí, Conquistadores y Aventureros participaron en varias actividades, incluyendo clases de honor y premios, demostraciones de habilidades, la ronda final de la Experiencia Bíblica de Conquistadores (EBC), exhibiciones, ferias, fogatas, caminatas, juegos y un servicio de investidura, donde 13 nuevos Guías Mayores fueron investidos.
El éxito del Camporí se debió a la dedicación del comité directivo, el personal de apoyo y las contribuciones financieras de la DNAP, la MSL, instituciones y particulares.
Thilan Weerasinghe, director asociado de Conquistadores para la MSL, declaró: “Por sobre todo, este evento no ha sido posible sin la gracia de Dios. Queremos dar las gracias a nuestro Señor por guiarnos a lo largo de diversos desafíos y mostrarnos que, con él, todo es posible”.
El artículo original se publicó en el sitio web de la División Norasiática del Pacífico.
