Todos son llamados a participar en el nuevo programa misionero de la iglesia

Todos son llamados a participar en el nuevo programa misionero de la iglesia

Los líderes de la iglesia buscan fomentar la participación de los miembros en el ministerio.

Cuando Judith Miranda y su esposo visitaron Malibú (California, Estados Unidos) hace diez años, no había ninguna iglesia adventista dentro de los límites de la ciudad. Miranda, una enfermera profesional, decidió no permanecer inactiva. Ella y otros creyentes fueron de mansión en mansión en esta acaudalada comunidad, orando con los residentes. En 2008 ayudó a establecer una creciente iglesia adventista de Malibú, que en el presente continúa con el ministerio de puerta en puerta. Miranda compartió su historia con los asistentes del Concilio Anual 2015 el viernes por la noche. “Pueden hacer todo el trabajo que quieran, pero si la obra de Dios no está en primer lugar, no van a ser felices”, dijo.

Los líderes de la iglesia destacaron ministerios como el de Miranda durante los cultos del fin de semana como métodos creativos fundamentales que ayudarán a lanzar la nueva iniciativa denominada “Participación Total de los Miembros”, también conocida como TMI.

En su sermón del sábado por la mañana, Ted Wilson, presidente de la Iglesia Adventista mundial, presentó este plan, que requiere de una participación activa y práctica en el ministerio de parte de cada miembro de cada iglesia, y en todo el mundo.

“Los miembros de esta iglesia mundial de casi 19 millones son llamados a asociarse con el Sembrador Celestial, con Jesucristo, para proclamar su mensaje final de amor, justicia, redención y advertencias proféticas para los últimos días, proclamando así el pronto regreso de Cristo”, dijo Wilson ante un auditorio repleto de líderes de la iglesia y delegados laicos. Wilson hizo un llamado a los laicos, de manera especial, para que ayuden a promover la misión de la iglesia más que nunca antes.

Duane McKey, el nuevo director de Escuela Sabática y Ministerios Personales de la Iglesia Adventista mundial, está ayudando a encabezar la iniciativa. Existen maneras realistas en las cada persona puede tomar parte, dijo. “Si no pueden predicar, quizá pueden orar”, McKey ha descubierto varias instancias en las los miembros de la iglesia crearon sus ministerios únicos y particulares. Una mujer de Columbia Británica (Canadá) tomó su guía telefónica y comenzó a orar por quince personas todos los días, contó. Gracias a su fidelidad, llevó a otras personas hacia Cristo.

El sábado por la tarde, los asistentes al Concilio Anual recibieron una tarjeta de compromiso que describe la Participación Total de los Miembros como “un plan calendario intencional de ganancia de almas que descubre las necesidades de la familia, los amigos y los vecinos; entonces comparte la manera en que Dios suple cada necesidad, lo que resulta en el establecimiento de iglesias con un énfasis en la retención, en compartir la predicación y en la disciplina”. Este plan incluye estrategias tales como la oración constante y el uso del método de ministrar de Cristo, la radio adventista y el apoyo televisivo, la obra misionera mediante el ministerio de salud, las inversiones en programas de Conquistadores y de jóvenes, y los esfuerzos de evangelización centrados en Cristo, entre otros.

McKey anima a todos los miembros para que participen. Cristo no regresará hasta que la iglesia se involucre completamente en la misión, dijo McKey. “Si tienen miedo, dejen de lado la comodidad”, dijo. “Pruébenlo, y Dios los bendecirá”.