Presidente de ADRA dice que las donaciones siguen estables a pesar de la crisis económica

Presidente de ADRA dice que las donaciones siguen estables a pesar de la crisis económica

Sandefur en los puentes de promoción, la creación

Debido a la tasa de desempleo, que se acerca al siete por ciento y a que más de medio millón de personas perdieron el empleo solo en noviembre, las donaciones a organizaciones benéficas tales como la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales podrían sufrir un marcado descenso estas fiestas.


Pero a pesar de la situación económica, las donaciones a ADRA siguen estables. La organización humanitaria mundial de la Iglesia Adventista fue testigo de un incremento no esperado de las donaciones este último año.


La organización se halla presente en 125 países, y cuenta con proyectos de seguridad de alimentos, gestión de las emergencias, educación básica, desarrollo económico y atención primaria de la salud.


Charles Sandefur, presidente de ADRA, conversó recientemente con ANN sobre las donaciones, la lucha de ADRA contra el comercio sexual y de cómo los puentes construidos por ADRA salvaron cientos de vidas durante un ciclón.


A continuación se presentan fragmentos de la entrevista.


ANN: ¿Cómo están respondiendo los donantes a la crisis económica?


Sandefur: A pesar del clima económico, la gente aún ha sido generosa este año. Eso significa que entienden que estos tiempos difíciles, las necesidades del mundo son mayores. Tenemos que recordar que la crisis significa que de cincuenta a cien millones de personas han caído bajo la línea de pobreza. Los millonarios aún no tienen problemas, pero los que luchan para sobrevivir son los más afectados por la crisis. Aunque las donaciones aún no han disminuido, la crisis implica que necesitamos incrementar nuestro apoyo a los necesitados.


ANN: ¿Están tomando medidas para reducir costos?


Sandefur: Sí. Hay mayores necesidades, de manera que hay que hacer ajustes. Por ejemplo, vamos a reducir los presupuestos de viaje, lo que es difícil por la naturaleza de nuestra tarea. Pero queremos mantener el nivel de asistencia a los beneficiarios de nuestros proyectos.


ANN: ¿Qué proyectos tienen para las fiestas?


Sandefur: Estamos buscando financiación para los refugiados y las personas internamente desplazadas [IDP], o refugiados dentro de sus fronteras. También tenemos programas para los que regresan y han perdido sus empleos, granjas y hogares. Vamos a trabajar con los sin techo, lo que representa un desafío en estas fiestas.


ANN: ADRA no tiene solo que ver con asistencia en caso de huracanes y tsunamis. ¿Qué otros servicios ofrecen?


Sandefur:  También nos ocupamos de luchar y de hablar por los que no tienen voz ni privilegios en este mundo. Esto se halla en armonía con Proverbios 31:8: “Abre tu boca a favor del mudo en el juicio de todos los desvalidos”.


Tenemos un programa que lucha contra el comercio sexual y la violencia contra las mujeres. Esto implica luchar contra la circuncisión femenina (mutilación genital). También contra el comercio sexual en la India, donde es un negocio obsceno y maligno. Niñas nepalesas de entre 10 y 14 años son vendidas como prostitutas. Les ayudamos a estudiar y les mostramos a los padres qué sucede cuando venden a sus hijas.


ANN: El dólar se ha fortalecido en comparación con otras monedas. ¿Cómo afecta esto las operaciones de ADRA?


Sandefur: Ha sido una bendición. Esto significa que las donaciones valen más. Durante varios años, el valor del dólar disminuyó, pero en las últimas semanas y meses se ha incrementado. Es muy pronto para decir si esto hará una diferencia a largo plazo, porque puede ser algo temporario. Nuestros proyectos dependen del dinero y las necesidades que tengamos, ya que no negociamos en el mercado cambiario.


ANN: ADRA está haciendo un llamado donde dice que cada dólar donado equivale a cuatro dólares. ¿Cómo es esto?


Sandefur: Para financiar algunos de nuestros proyectos, tenemos que reunir fondos privados en un 25 por ciento. Por ejemplo, acabamos de aprobar un gran proyecto en el este del Congo, donde trabajamos en un gran número de aldeas en actividades sanitarias, de agricultura y entrenamiento laboral. Entonces, si la familia adventista realiza más donaciones para este proyecto, nosotros podemos igualar esas cantidades y solicitar fondos a razón de cuatro a uno. El gobierno de los Estados Unidos es el que provee el porcentaje restante.


ANN: ¿Cuál es la mejor historia relacionada con ADRA que haya escuchado en los últimos tiempos?


Sandefur: Tres semanas atrás regresé de Myanmar. ADRA estuvo allí durante varios años reconstruyendo puentes que habían sido destruidos por el tsunami de diciembre de 2004. Reconstruimos 22 puentes. Los hicimos sólidos y elevados. La gente del lugar se quejaba de que eran muy empinados y les costaba tirar sus carros por sobre ellos.


Cuando llegó el ciclón Nargis, la mayoría de las muertes se produjeron no por el viento sino por el ingreso del océano. La gente corrió hacia los puentes, y ni uno de esos puentes fue destruido. Cientos de personas se salvaron. Pude visitar algunos de esos puentes y fue muy emocionante pensar que muchas vidas fueron salvadas gracias a uno de nuestros proyectos.