Southern Asia-Pacific Division

Los esfuerzos de evangelización dirigidos por Secretaría en el suroeste de Filipinas dan como resultado más de 130 bautismos

Desde la llegada de los protestantes en los años setenta, ha habido un aumento de creyentes adventistas en la región de Caraga.

Miembros recién bautizados se agrupan para una oración de dedicación después de su ceremonia de bautismo durante la reunión de evangelización en las Islas Dinagat, suroeste de Filipinas, celebrada del 17 al 21 de abril de 2024.

Miembros recién bautizados se agrupan para una oración de dedicación después de su ceremonia de bautismo durante la reunión de evangelización en las Islas Dinagat, suroeste de Filipinas, celebrada del 17 al 21 de abril de 2024.

[Foto: Cortesía del departamento de Comunicación de la USOF]

En respuesta a la Iniciativa Todo Miembro Involucrado (TMI) de la Iglesia Adventista Mundial, la Iglesia Adventista del Sudoeste de Filipinas (USOF) movilizó a su equipo de secretaría para encabezar una campaña de evangelización en las Islas Dinagat, que llevó al bautismo de más de 130 personas a la fe adventista. Del 17 al 21 de abril de 2024, 48 secretarios de oficina de la USOF llevaron a cabo una iniciativa evangelizadora en las Islas Dinagat, parte de la región de Caraga, compartiendo mensajes de esperanza y fe con los residentes locales.

Aunque las secretarias de las organizaciones adventistas son reconocidas por su pericia y profesionalidad a la hora de garantizar la fluidez de las operaciones, esta iniciativa puso de relieve su compromiso de compartir el Evangelio por medio de la evangelización pública. Este acontecimiento demuestra la eficacia de TMI y subraya la importancia de la participación de todos a la hora de compartir el Evangelio por medio de diversas estrategias y lugares.

“La gente local es respetuosa y amable. Son hospitalarios y están atentos a las necesidades de sus huéspedes”, dijo Vicky Pamonag, secretaria de la sede de la USOF y una de las predicadoras en el evento de una semana de duración. Añadió que participar en las campañas de evangelización le produce una gran alegría y le brinda la oportunidad de compartir el amor de Dios con los no creyentes. “Debo comprometerme en la obra de Dios más allá de los confines de una oficina. Participar en esta labor aporta plenitud espiritual a mi vida”, añade.

Los mensajes nocturnos durante la campaña abarcaron una serie de temas esenciales que introducían verdades bíblicas, como el sábado, la salvación, el estado de los muertos, el cielo, los principios de salud y el bautismo. Cada tema se presentó cuidadosamente para abordar las necesidades y curiosidades espirituales de los asistentes.

El éxito de la misión es evidente en el número de personas que decidieron aceptar a Jesús como su Salvador personal, lo que supone un total de más de 130 nuevos miembros que han abrazado la fe adventista. Esta conversión no es solamente un testimonio del poder del mensaje compartido, sino también del compromiso y la pasión de los secretarios de oficina que participaron en la campaña.

La iniciativa de la Unión del Suroeste de Filipinas de organizar un evento tan impactante pone de relieve la eficacia de los esfuerzos de colaboración en la evangelización. La dedicación de las secretarias, combinada con la receptividad de los residentes de las islas Dinagat, ha dado como resultado una cosecha espiritual significativa, creando una comunidad adventista más fuerte en la región.

Desde la sede de la unión, situada en Cagayan de Oro City, viajar a las islas Dinagat llevaría al menos 11 horas, incluido un ferry. Dinagat es una de las comunidades más antiguas de la región de Caraga; su prosperidad se remonta a la época precolonial. La provincia insular fue escenario de la histórica Batalla del Estrecho de Surigao durante la Segunda Guerra Mundial. En 2011, las islas Dinagat se convirtieron oficialmente en provincia, separándose de Surigao del Norte. Su población actual supera los 100.000 habitantes. Desde la llegada de los protestantes en la década de 1970, ha habido un aumento de creyentes adventistas en la zona.

El artículo original se publicó en la División Sudasiática del Pacífico.

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