Los miembros de una iglesia pueden tener varias motivaciones para llegar temprano a la iglesia cada semana, pero para los miembros de la Iglesia Adventista del Séptimo Día de Hagen Park en Monte Hagen, Tierras Altas Occidentales, Papúa Nueva Guinea (PNG), la motivación para acudir en masa al templo cada sábado a las 8:00 de la mañana es simple.
“Queremos encontrar un sitio donde sentarnos”, dicen. “Y todos saben que, si quieren participar del culto adentro, tienen que llegar temprano”.
La congregación, en constante crecimiento, ha terminado recientemente un proyecto de remodelación. El 2 de mayo de 2024, Ted N. C. Wilson, presidente de la Asociación General (AG), Ramón Canals, secretario ministerial de la AG, y Aurora Canals, directora de la Asociación Femenina del Área Ministerial y Familias Pastorales, entre otros líderes de la iglesia, asistieron a la dedicación del santuario remodelado y participaron en los temas musicales de celebración y en las oraciones.
Wilson, quien es uno de los miles de oradores que actualmente dirigen los esfuerzos de evangelización en toda Papúa Nueva Guinea, predica y se aloja a una hora de Monte Hagen, en Minj, Jiwaka. Durante su breve visita del 2 de mayo, compartió una comida con docenas de oradores locales e internacionales que están dirigiendo reuniones de evangelización en la tercera ciudad más poblada de Papúa Nueva Guinea.
Además de la rededicación del santuario de la iglesia, los líderes de la iglesia encabezados por Wilson inauguraron la posada contigua Hagen Park Care Inn, una iniciativa del Ministerio Adventista de las Posibilidades. Tan pronto como se completen los últimos detalles de amueblamiento, el centro abrirá sus puertas para prestar servicios a personas que sufren diversas discapacidades, explicó el pastor de la iglesia local, Richard Jacob.
“En la segunda planta, vamos a abrir un refugio para mujeres y niños víctimas de la violencia doméstica”, dijo Jacob. “Esas mujeres y sus hijos pequeños podrán quedarse en el refugio hasta que encuentren una salida”.
Esta iniciativa, orientada a la evangelización, podría ser una de las razones por las que la iglesia de Park Hagen sigue creciendo. También podría explicar la fidelidad de sus miembros. El 4 de mayo, dos días después de la toma de posesión, la Escuela Sabática comienza en el interior del santuario con la iglesia en pie. Docenas de personas se sientan fuera, al sol o bajo los árboles cercanos, mientras intentan seguir el acto.
En el interior, el líder de la Escuela Sabática pregunta a los asistentes cuántos son los que asisten por primera vez. Más de una docena de personas levantan la mano. Y el culto no ha hecho más que empezar.
“Tras un programa de apertura, los miembros se dedican a estudiar la lección de Escuela Sabática de la semana”, explica Jacqueline Wari, directora de Comunicación de la Unión de Papúa Nueva Guinea. “Y eso es solo el principio. Luego viene la alabanza y la adoración, y un servicio divino. Luego, muchos se quedan a almorzar bajo los árboles. Y a las 16, los que se quedan participan en otro programa que termina con un culto de clausura del sábado. Ir a la iglesia es aquí una empresa de todo el día”.
El artículo original se publicó en el sitio web de Adventist Review.