Bajo el lema “Pararse en la brecha”, la Red de Oración de los Ministerios de Jóvenes Adventistas (AYM) de la División División Sudasiática del Pacífico (DSAP) llevó a cabo su primer congreso presencial desde la pandemia, del 7 al 11 de diciembre de 2022, en la sede del Movimiento de los 1.000 Misioneros, ubicada en Silang, Cavite, Filipinas. Los dos primeros congresos se realizaron vía Zoom en 2020 y 2021.
El congreso tuvo los siguientes objetivos: (a) unir a los coordinadores de la Red de Oración y a los directores de Jóvenes de la DSAP; (b) fortalecer la Red de Oración de cada unión, asociación y misión; (c) proporcionar experiencias de oración creativas e interactivas para todos los asistentes, con el fin de capacitarlos para salvar la brecha entre la iglesia y la comunidad (DSAP y más allá); (d) orar por las ciudades y territorios no alcanzados de la DSAP; (e) visitar las instituciones cercanas y orar por ellas: Movimiento de los 1.000 Misioneros, Adventist International Institute of Advanced Studies (AIIAS), la DSAP, la Casa Editora de Filipinas, y la Universidad Adventista de Filipinas; (f) someter todos los planes de los jóvenes al Señor; y (g) dar a Dios la gloria.
Citando el libro Mensajes para los jóvenes, de Elena de White, el Pr. Roger Caderma, presidente de la DSAP, extendió la bienvenida a los delegados. Afirmó: “ ‘En medio de los peligros de estos últimos días, la única seguridad para la juventud está en la vigilancia y la oración siempre crecientes’. Santiago nos dice que ‘la oración del justo es poderosa y eficaz’ (Santiago 5:16, NVI)”.
Y continuó: “En el libro de Ezequiel, Dios menciona especialmente que un hombre fiel puede “pararse en la brecha”. ¿Quién es esa persona que puede pararse en la brecha? ¿Puedo pararme en la brecha? Sí, ¡puedes! Cualquiera de nosotros puede ser esa persona. No necesitamos tener cualidades de liderazgo asombrosas; tenemos que humillarnos ante Dios, su Palabra, y estar dispuestos (ver Isaías 58:6-12(”.
En sus palabras de bienvenida, el Dr. Ron Genebago, director de Jóvenes de la DSAP, destacó la importancia de la oración, citando a Elena de White: “Si hubiese más oración en los concilios de los que llevan responsabilidades, si los corazones se humillaran más delante de Dios, veríamos abundantes evidencias de la dirección divina, y nuestra obra haría rápidos progresos” (Testimonios para la Iglesia, t. 8, p. 249). Y añadió: “Por lo tanto, si queremos que la obra de Dios progrese rápidamente y ver el liderazgo divino en el ministerio de los jóvenes y en la iglesia, necesitamos orar mucho. Deseamos ver un liderazgo de oración en los jóvenes de la DSAP”.
“El Hombre parado sobre la brecha es Jesús. Podemos interceder por los demás porque Jesús está en la brecha por nosotros. Cuando te sientas tentado y te encuentres en una situación difícil y te preguntes si Dios está contigo, recuerda quién está orando por ti. Recuerda que Cristo es nuestro poderoso guerrero de oración. Ten fe y persevera en la oración”, subrayó durante el congreso el Dr. Abner De los Santos, vicepresidente de la AG. También invitó a los delegados a orar por los demás como lo hace Jesús.
“El congreso fue un soplo de aire fresco, después de haber asistido únicamente a sesiones de oración en línea por medio de Zoom. Ver a la gente y orar juntos es una experiencia muy diferente. Las reuniones de trabajo también han demostrado ser una bendición muy necesaria. Me he dado cuenta de que no solo estoy llamado a orar por los perdidos, los quebrantados y los enfermos, sino que también necesito conocer a mi Jesús por medio de la oración sincera”, dijo Michael Jan C. Fuentes, coordinador de oración de la Asociación Occidental de las Visayas (parte de la Unión Central de Filipinas).
Otros oradores de los plenarios trataron diversos temas relacionados. El Pr. Mamerto Guingguing, secretario asociado de la DSAP y director de Gestión de Recursos Humanos, compartió el mensaje “Párate en la brecha como Nehemías”. El Dr. Abner Dizon, director de Servicios Interreligiosos para Ministerios Musulmanes, Seculares y Postmodernos, centró su sesión plenaria en el tema “Párate en la brecha por las ciudades no alcanzadas”.
El pastor Glenn Lagabon, pastor asociado de la Iglesia Central de Manila, presentó a los delegados la importancia de la música en la oración y cómo convertir las oraciones en música, en su presentación “Pararse en la brecha mediante la música y la oración”. El Dr. Genebago presentó el estudio bíblico de la oración ardiente de David y Jesús: “Dios mío, Dios mío, por qué me has abandonado”.
El Pr. Jacinto Adap, tesorero de la DSAP, animó a los jóvenes al presentar el ejemplo de Epafras de interceder por los demás. Epafras constantemente trabajaba fervientemente por los miembros de la iglesia en oración, para que pudieran permanecer perfectos y completos en toda la voluntad de Dios (ver Colosenses 4:12). Durante el servicio de dedicación, el Pr. Felixian Felicitas, decano de la Facultad de Teología, dirigió a los delegados en un estudio sobre “Pararse en la brecha hasta que no haya brecha”.
Además de las sesiones plenarias, el congreso también contó con sesiones paralelas, con los siguientes temas y oradores: (a) “Cómo orar por sanidad”, por el Pr. Edgar Bryan Tolentino, director asociado del White Estate; (b) “Cómo orar por los deprimidos y abatidos”, por la hermana Jo Ann Amparo, directora de Salud de la DSAP; (c) “Cómo combinar las Escrituras y la oración”, por el hermano Bing Alabata, evangelista itinerante; (d) “Cómo permanecer en Jesús diariamente por medio de un la escritura de un diario”, por la hermana Jazel May Diaz, capellana universitaria; (e) “Cómo orar con eficacia por los perdidos”, por el pastor Elexiz Mercado, subgerente de Radio Mundial Adventista; (f) “Cómo superar las adicciones y vivir de manera victoriosa”, por el Dr. Jan Cabungcal, neurocientífico; (g) “Cómo organizar, hacer crecer y sostener una red de oración”, por Gen Camato, coordinador de la Red de Oración de la DSAP, e Ivan Mae Flores, coordinador de la Red de Oración del sur de Filipinas; y (h) “Cómo orar por el crecimiento financiero”, por Davin Bennett, piloto misionero.
Algunos de los delegados compartieron las bendiciones de haber participado del congreso. Abby Villones, coordinadora de la Red de Oración de la Asociación de Negros Occidental, dijo: “Siento inmensamente su Espíritu, especialmente durante el congreso de la Red de Oración de la DSAP, y tengo dos razones: En primer lugar, sentí el Espíritu cuando pude estar en un círculo de creyentes unidos orando, alabando y dando gracias a Dios en persona, algo por que habíamos estado anhelando y por lo que habíamos orado; y, en segundo lugar, siento su Espíritu mediante su sabiduría cuando aplicamos cada lección que aprendimos durante las sesiones regulares y plenarias”.
Villones concluyó: “Espero [aprender] más acerca de él y tener oportunidades para conocer más acerca de él mientras continúo parándome en la brecha”.
“Asistir a la sesión ‘Oraciones para sanar’, del Pr. Bryan Tolentino, fue una bendición para mí. Me di cuenta de que no estaba sola en mis luchas. El congreso me ha dado mucho ánimo, ya que muchos se acercaron a mí en busca de consejo como líder de jóvenes. Me ha recordado que debemos incluir continuamente a nuestros líderes en la oración y empatizar con ellos en su condición más vulnerable”, dijo Jasper Yubal Bagdoc, coordinador de Oración de la Asociación de las Visayas Orientales.
Glenn Mark Paragoso, coordinador de Oración de la Misión Central de Mindanao, dijo: “Durante el congreso de oración, me sentí muy bendecido; siento que Dios está en nuestro corazón. No esperaba poder participar, pero Dios es muy bueno conmigo. Sabe que soy yo quien más lo necesita. También me han bendecido las presentaciones a las que he asistido. Dios es Dios para mí y para todos nosotros. Gracias”.
Camato se mostró agradecido a Dios por quienes habían sido decisivos para hacer posible el evento. “Alabo al Señor una vez más, porque hizo posible que el congreso de oración pasara de ser virtual a presencial. Alabo a Dios por todos los que trabajaron tras bastidores: el personal de la Red de Oración de la DSAP y el equipo de medios de comunicación, los directores de jóvenes, los expositores, los padres y los delegados. Mi única oración es que la red de oración continúe siendo un motor de todos los Ministerios de Jóvenes Adventistas en toda la División Sudasiática del Pacífico. A Dios sea la gloria”.
La versión original de este artículo se publicó en el sitio web de la División Sudasiática del Pacífico.