En respuesta al aumento de los casos de dengue en la región de Serra, un municipio de Espírito Santo (Brasil), la Escuela Adventista local puso en marcha un proyecto innovador que incluye la producción de un repelente casero, actividades de concientización y la distribución gratuita del producto en la comunidad. El objetivo del proyecto es combatir la propagación del mosquito Aedes aegypti, también conocido como mosquito de la fiebre amarilla, y educar a los estudiantes y residentes respecto a las medidas de prevención contra la enfermedad.
El 25 de abril de 2024, los estudiantes salieron a la calle armados con carteles y mensajes de concientización, para repartir el repelente casero que habían fabricado.
“La necesidad surgió cuando notamos un aumento significativo de los casos de dengue aquí y en los barrios cercanos. Observamos un gran número de consultas en las unidades de urgencias y centros de salud a causa de la enfermedad”, explica Mara Sandra, coordinadora pedagógica del proyecto. Según ella, la iniciativa comenzó con una semana de concientización vinculada a varias disciplinas, en la que los alumnos aprendieron acerca de los peligros y las formas de prevenir el dengue. “Profesores y alumnos participaron en la creación de carteles y otros materiales educativos para difundir conocimientos acerca de la enfermedad”, añadió.
Tras la fase de concientización, los alumnos de primero a noveno de Primaria I y II elaboraron un repelente casero. “Muchas familias no pueden permitirse comprar repelentes industriales, así que creamos una solución casera que resultó ser realmente eficaz”, destacó la coordinadora. El producto se distribuyó gratuitamente, con instrucciones acerca de cómo reproducirlo de forma práctica y económica.
Los alumnos participaron activamente en la iniciativa. Guilherme Amado Storck, alumno de noveno año, relató su experiencia: “Nuestra acción de repartir repelentes estuvo muy bien. Además de socializar con los amigos, pudimos ayudar a la gente. Todo el mundo estaba muy contento, y eso también nos hizo felices a nosotros. De eso no hay duda. Lo volvería a hacer todo”.
Isabely do Nascimento Miler, otra de las estudiantes participantes, compartió sus impresiones: “La experiencia fue muy divertida. Además de ayudar, conseguí desarrollar mis habilidades sociales. Repartir repelente a la gente en la calle, saludarles y desearles un buen día fue enriquecedor. Aprendimos acerca de la gravedad del dengue, que se ha cobrado muchas víctimas, y eso reforzó la importancia de nuestro trabajo”, concluye.
El artículo original se publicó en el sitio web en portugués de la División Sudamericana.