Northern Asia-Pacific Division

La Asociación de Taiwán inicia la primera plantación de una iglesia en una isla exterior

Los únicos medios de transporte entre Taiwán y Kinmen son aviones y barcos. La plantación de iglesias fue posible gracias a los debates en línea y a un grupo de oración.

[Fotografía: División Norasiática del Pacífico]

[Fotografía: División Norasiática del Pacífico]

La Asociación de Taiwán de los Adventistas del Séptimo Día, comprometida con la predicación de las verdades bíblicas en todo el país, así como en Penghu, Kinmen y Matsu, inició la primera plantación de una iglesia en una isla exterior en Kinmen. Este movimiento estratégico, que tuvo lugar en noviembre de 2022, marca una expansión significativa de su misión de guiar a los residentes hacia el cristianismo y prepararlos para el regreso de Cristo. Después de 70 años sin iglesia en estas islas, Kinmen surge como el lugar elegido, principalmente debido a la presencia de tres familias adventistas que anclan los cimientos de la nueva iglesia.

Esta decisión crucial, impulsada por la necesidad de nutrir y equipar a los discípulos locales, recibió el pleno respaldo del presidente de la Asociación, el pastor Tom Sun, lo que subraya la importancia de confiar en la influencia del Espíritu Santo respecto a una planificación cuidadosa. Un comité preparatorio, establecido para supervisar el desarrollo de la iglesia, sorteó los desafíos de la distancia y la logística, conectando principalmente con la congregación de Kinmen por medios digitales, debido al remoto acceso de la isla por avión y barco.

En un paso significativo hacia la unidad espiritual, en febrero de 2023 se formó un grupo de oración en línea, que fomentó un vínculo más fuerte entre los creyentes mediante sesiones regulares de oración en línea y prácticas espirituales. Los esfuerzos de colaboración culminaron en un servicio de agradecimiento el 14 de octubre, celebrando el éxito del establecimiento de la iglesia en Kinmen. Este acto puso de relieve la dedicación y la fe que han impulsado el proyecto, marcando un nuevo capítulo en la vida espiritual de la comunidad de la isla.

El establecimiento de la iglesia de Kinmen, logrado tras meses de colaboración en línea y preparación in situ, es un testimonio del compromiso de la Asociación de Taiwán con su misión y del poder de la fe para superar las barreras geográficas. Esta nueva iglesia se erige como un faro de esperanza y fe para los residentes de Kinmen, encarnando la visión de la Asociación de difundir el Evangelio y preparar la segunda venida de Cristo.

La versión original de esta noticia se publicó en el sitio web de la División Norasiática del Pacífico.

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