Su nombre es Carito Carbajal, y esta es su historia. Estudió la carrera de Educación en Idiomas y actualmente trabaja en la Municipalidad de la ciudad de Trujillo, en el norte de Perú. A pesar de la influencia adventista de su madre desde muy pequeña, Carito siempre actuó con rebeldía, mostrando desinterés por la religión y prefiriendo la música metal rock, así como asistir a conciertos y lugares donde se tocaba este tipo de música.
Sin embargo, todo cambió cuando conoció a Rafael Cedeño, quien actualmente es su esposo y se desempeña como contador y empresario en Trujillo. A pesar de haberlo visto en un evento de metal rock, se hicieron amigos y comenzaron a salir juntos. Fue entonces cuando Rafael empezó a hablarle de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, mencionando sus propios lazos con esta religión y su deseo de compartir creencias con su pareja.
A partir de ese momento, Carito sintió una creciente curiosidad por conocer más de Dios. A pesar de haber visitado varias iglesias sin encontrar respuestas satisfactorias, decidieron asistir a la Iglesia Adventista del Séptimo Día Filadelfia. Aunque al principio se sintió incómoda y desconcertada por los temas tratados, eventualmente encontraron su lugar en la Escuela Bíblica de Nuevo Tiempo, un espacio dentro de la iglesia con una clase de estudios de la Biblia que se ofrecen por la TV y la radio, donde profundizaron en su comprensión de la fe y sintieron un llamado profundo a entregarse a Dios.
Finalmente, el martes 26 de marzo, durante uno de los programas de la Caravana de Esperanza que se desarrolló por Semana Santa en el Estadio Mansiche de Trujillo, Carito y Rafael tomaron la decisión de ser bautizados. Este acto marcó un nuevo comienzo en su vida, donde expresaron su deseo de seguir a Dios y aceptar Su amor incondicional como pareja comprometida en la fe, ante la presencia de 25.000 asistentes en el lugar.
Los pastores Marcos Mostacero, líder del Ministerio Personal de la región norpacífico del Perú, y Javier Cabrera, coordinador de la Escuela Bíblica Nuevo Tiempo de la misma región, presidieron el bautismo. Cabrera resaltó la importancia de la Escuela Bíblica como agencia de evangelismo, buscando que las personas conozcan a Jesús y sean bautizadas tras estudiar la Biblia.
El artículo original se publicó en el sitio web en español de la División Sudamericana.