Cientos de miembros de la comunidad y funcionarios de gobierno asistieron al funeral
El último sábado de 2013 fue un día trágico para la Iglesia Adventista de Malaui, en África, cuando un rayo cayó sobre una congregación y provocó la muerte de ocho adventistas, además de herir a decenas más.
El rayo cayó sobre la iglesia adventista de Chisiyo, en la ciudad capital de Lilongüe, poco después de una tormenta en la tarde del 28 de diciembre. La tormenta eléctrica dejó inconscientes a la mayoría de los doscientos presentes. Los heridos fueron trasladados a un hospital a unos 15 kilómetros del lugar.
Ocho fueron declarados muertos, incluidos cuatro integrantes de la Sociedad de Dorcas y cuatro integrantes de los Jóvenes Adventistas. Uno de ellos pertenecía a un grupo coral que estaba de visita y había llegado a dirigir un programa musical.
El culto del sábado había sido extendido, dado que se llevó a cabo una Santa Cena y una ceremonia de transferencia de líderes.
Los adventistas de otras partes de la ciudad se apresuraron a llegar al lugar para ofrecer ayuda, que incluyó dinero y apoyo emocional.
El Gobierno de Malaui también respondió ofreciendo alimento, transporte y otros artículos necesarios para llevar al funeral.
Cientos de miembros de la comunidad y funcionarios de gobierno asistieron al funeral, que se llevó a cabo el 30 de diciembre.
“Sigamos orando por las familias afectadas y por los miembros de iglesia de la iglesia adventista de Chisiyo”, dijo M. S. J. Kadyakapita, profesor de la Universidad Adventista de Malaui. “Oremos de que el encuentro en la iglesia no provoque recuerdos dolorosos y atemorizantes entre los miembros”.
En Malaui hay aproximadamente 393 mil miembros bautizados de la Iglesia Adventista.