Después de una larga espera, los miembros adventistas y los visitantes de la Iglesia de Colmenar Viejo, en España, celebraron un sábado especial para inaugurar oficialmente su congregación el 20 de mayo de 2023. La iglesia es la primera congregación adventista en la ciudad, donde tiene su sede la Editorial Safeliz, de gestión adventista.

El nacimiento y el desarrollo de la nueva iglesia fue el resultado del sueño de la editorial de tener presencia por medio de una congregación en Colmenar Viejo (48.600 habitantes), localidad que forma parte del Gran Madrid. Sin embargo, en lugar de limitarse a soñar, Safeliz tomó parte activa mediante donaciones propias y la búsqueda de fondos de otras organizaciones adventistas de la región y de fuera de ella para hacer realidad el proyecto.

Durante el desarrollo, se produjeron una serie de acontecimientos que, en opinión de los líderes, 2fueron la prueba de que Dios estaba dirigiendo [su] proyecto”, dijeron.

APOYO DESDE EL OTRO LADO DEL OCÉANO

La inauguración coincidió con la celebración de reuniones de evangelización en la nueva iglesia, en las que participó como orador invitado Erton Köhler, secretario de la Asociación General de los Adventistas del Séptimo Día. Fue un momento significativo para Köhler, quien, en su anterior cargo como presidente de la División Sudamericana, supervisó la aprobación de una ayuda especial en apoyo de este proyecto.

2La División Sudamericana nos dio una cantidad que contribuyó a hacer realidad nuestro sueño”, dijo Mario Martinelli, presidente de Safeliz. “Y nos alegra que el pastor Erton pueda estar hoy aquí para participar de esta celebración”.

Martinelli preguntó a Köhler por qué una región eclesiástica tan lejana decidía apoyar un proyecto en otra región.

“La Iglesia Adventista del Séptimo Día es una familia mundial”, dijo Köhler a modo de respuesta. “Dios nos organizó en regiones para que, de alguna manera, pudiéramos ocuparnos de un territorio concreto. Pero nuestra familia y nuestra misión son globales. Y si hay un desafío en algún lugar del mundo, el desafío es para que todos lo afronten”.

[Foto: Marcos Paseggi, Adventist Review].

UN SUEÑO LARGAMENTE ACARICIADO

Desde 2011, los líderes de la Editorial Safeliz han tenido el sueño de plantar una iglesia adventista en Colmenar Viejo.

“Teniendo en cuenta que Safeliz distribuye sus publicaciones en más de 130 países y ofrece cursos para que las buenas nuevas del Evangelio lleguen a muchos lugares del mundo, no podíamos aceptar que, en el mismo pueblo donde se encuentra la editorial, no hubiera congregaciones adventistas”, dijo Martinelli.

El director comercial, Sergio Mato, se mostró de acuerdo y explicó que también suelen hacer negocios con empresas locales. “Queríamos convertirnos en un punto de referencia para ellos, y también en un centro de evangelización para los suburbios del norte de Madrid”.

DIOS ESTABA GUIANDO

Durante años, los líderes de Safeliz barajaron varias opciones pero, por alguna razón, ninguna de ellas llegó a buen puerto. “Sin embargo, aunque no lo sabíamos, Dios tenía otra solución en mente”, dijo Martinelli.

En octubre de 2019, encontraron un edificio que pensaron que podrían alquilar para poner en marcha una congregación. Sin embargo, cuando consultaron con los propietarios, les dijeron que el edificio ya estaba alquilado y que el contrato de alquiler no expiraría hasta dentro de dos años.

2Era viernes cuando recibimos la respuesta”, cuenta Rubén Ferreira, uno de los miembros del comité de búsqueda. “Nos sentimos muy abatidos. Fue un fin de semana muy triste”.

Al lunes siguiente, sin embargo, llamó el propietario del edificio.

“No te vas a creer lo que ha pasado”, le dijo el propietario a Ferreira. “Después de que te fueras el viernes, ¡recibimos una carta certificada de nuestros inquilinos en la que nos comunicaban que rescindían el contrato de alquiler a partir de ese mismo día!”.

“¡Nos quedamos tan sorprendidos!”, exclamó Ferreira. “A partir de ese momento, comprendimos que Dios estaba detrás de nuestros planes”.

Tras reunirse con los propietarios, les preguntaron si no querían venderlo en lugar de alquilarlo. Aceptaron venderla. “Al cabo de unos días, [durante] los cuales los propietarios tasaron el edificio, ¡nos dieron una cantidad inferior a su valor de mercado! En aquel momento, volvimos a tener la certeza de que el Señor nos guiaba”, declaró Ferreira.

Martinelli dijo que, cuando presentaron el proyecto a los líderes regionales de la iglesia, estos lo apoyaron de todo corazón. “Tanto la División Intereuropea como la Unión Española nos ayudaron con algunos fondos”, dijo. “Otras instituciones de la región y de fuera de ella también nos ayudaron, incluida la División Sudamericana”.

[Foto: Marcos Paseggi, Adventist Review]

UNA INAUGURACIÓN POSPUESTA

Después de remodelar el edificio, los líderes planificaron la primera reunión sabática especial en la nueva iglesia para el 21 de marzo de 2020. Sin embargo, el 14 de marzo, justo una semana antes, el gobierno español impuso un bloqueo debido a la pandemia de COVID-19; se prohibió circular libremente y se cancelaron las reuniones públicas.

En abril de 2020, la Unión Española nombró a Sergio Martorell pastor de la nueva iglesia, y los miembros empezaron a reunirse por medio de Zoom. El 22 de mayo se estableció como grupo con apenas seis o siete familias pero, con el paso de las semanas y los meses, la congregación fue creciendo. Con el tiempo, los miembros volvieron a reunirse en persona.

“Al igual que hizo [el] profeta Samuel, nosotros también decimos: ‘Hasta aquí nos ha ayudado el Señor’ ”, dijo Martorell. “La iglesia no es un edificio... no es un techo o las paredes. La gente es la iglesia. Todos los que nos reunimos aquí somos la iglesia. Y doy gracias a Dios por esta iglesia, que actualmente cuenta con 80 miembros bautizados. Es una iglesia pequeña pero muy dinámica, y una iglesia centrada en la evangelización”.

La versión original de esta noticia fue publicada en el sitio web de la Adventist Review.