Al aceptar la designación de parte de Trump, Ben Carson está en camino a convertirse el primer adventista secretario del Gabinete de los Estados Unidos

Al aceptar la designación de parte de Trump, Ben Carson está en camino a convertirse el primer adventista secretario del Gabinete de los Estados Unidos

El neurocirujano estará al frente del departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano

El doctor Benjamin S. Carson Sr., un destacado neurocirujano pediatra y adventista que fue el primer miembro de la iglesia en buscar la nominación presidencial de los Estados Unidos, ha aceptado la oferta del presidente electo Donald J. Trump para convertirse en secretario del departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano, conocido comúnmente como HUD, una agencia federal con un presupuesto anual de 48 mil millones de dólares.

Según el sitio web de la agencia, el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano (HUD), que fue establecido en 1965 como un departamento del Gabinete, es la “agencia federal responsable de las políticas y programas nacionales que responden a las necesidades de vivienda del país, de mejorar y desarrollar las comunidades de la nación y de implementar leyes de vivienda justas”. Al analizar la designación, Carson dijo a Fox News que “los barrios centrales de muchas ciudades se encuentran en un estado calamitoso, y definidamente necesitan atención real”.

De confirmarse su nominación en el Senado de los Estados Unidos, Carson se convertiría en el 17° Secretario de Vivienda y Desarrollo Urbano y el primer adventista en ocupar un puesto en el Gabinete. Según el Servicio de Investigaciones del Congreso, el secretario de HUD es también el decimotercero en línea de sucesión a la presidencia de los Estados Unidos.

“Me siento entusiasmado de nominar el doctor Ben Carson como nuestro nuevo secretario de Vivienda y Desarrollo Urbano. Ben Carson tiene una mente brillante y es un apasionado por fortalecer las comunidades y las familias dentro de esas comunidades”, expresa una declaración que afirma citar a Trump. “Hemos hablado largamente sobre mi agenda de renovación urbana y nuestro mensaje de reavivamiento económico, lo que incluye mucho a los barrios centrales de las ciudades. Ben comparte mi optimismo sobre el futuro de nuestro país, y es parte de garantizar que esta es una presidencia que representa a todos los estadounidenses. Él es un competidor duro, y jamás se da por vencido”.

La misma declaración cita a Carson: “Siento que puedo hacer una contribución significativa, en particular al fortalecer a las comunidades que más lo necesitan. Tenemos mucho trabajo por hacer para mejorar cada aspecto de nuestra nación, y para garantizar que las necesidades de vivienda de nuestro país se vean satisfechas”.

Carson, que tiene 65 años, se retiró como Director de Neurocirugía Pediátrica del Hospital John Hopkins en Baltimore (Maryland) en 2013. Su exitosa operación para separar mellizos siameses unidos por la cabeza lo catapultó a la prominencia internacional. Su historia personal que lo llevó a elevarse de la pobreza en Detroit (Míchigan) gracias al trabajo duro, una dedicación a la educación, y la fe en Cristo, fue la temática de “Manos consagradas”, una autobiografía que más tarde fue transformada en una película para la televisión con la actuación del ganador del Oscar Cuba Gooding Jr. en el papel de Carson.

En 2008, Carson recibió la Medalla Presidencial de la Libertad de manos del entonces presidente George W. Bush, quien destacó el triunfo de Carson sobre un “futuro desalentador” de pobreza y delito para llegar a ser “un erudito, un sanador y un líder”. Sonya, la madre de Carson y quien influyó en su vida temprana, asistió a la ceremonia en la Casa Blanca, junto con Candy, esposa de Carson. Ben y Candy Carson, junto con sus hijos, son miembros de la iglesia adventista de Spencerville, en Silver Spring (Maryland).

En mayo de 2015, Carson anunció su postulación presidencial, provocando la atención a su conexión adventista. La División Norteamericana dijo en ese momento que aunque el adventismo “valora” a Carson, “es importante que la iglesia mantenga su apoyo histórico a la separación de la Iglesia y el Estado y que, por lo tanto, no respalde o se oponga a ningún candidato en particular”.

Ningún adventista había tenido antes un cargo a nivel del Gabinete en la historia de los Estados Unidos. El presidente Warren G. Harding, cuya madre y hermana eran adventistas, designó varios parientes adventistas en puestos de gobierno después de su elección en 1920, pero ninguno de ellos tuvo el rango de miembro del Gabinete. La hermana de Harding, Carolyn Harding Votaw, estuvo al frente de la división de servicios sociales del Servicio de Salud Pública de los Estados Unidos, y su esposo, Heber Votaw, fue designado por el Procurador General de Harding como Superintendente de Prisiones del gobierno federal. Ambos dejaron el cargo menos de un año después del fallecimiento del presidente Harding en 1923 por un paro cardíaco.

 

En épocas más recientes, el capellán Barry C. Black, un contralmirante de la Armada retirado y jefe de capellanes navales, fue designado por el Senado de los Estados Unidos como capellán del Senado, el primer adventista y el primer afroamericano en ocupar ese cargo. Algunos adventistas también han cumplido funciones en el Congreso de los Estados Unidos, lo que incluye a Roscoe Bartlett, Jerry Pettis y los actuales representantes Sheila Jackson Lee de Texas y Raul Ruiz de California.