Pastores adventistas de la región sureste de la República Dominicana dejaron hace poco sus congregaciones por una semana para participar de un viaje misionero especial en la municipalidad de Pilancón en Bayaguana, en la provincia de Monte Plata, el mes pasado. El objetivo fue construir una iglesia bajo la conducción de Maranatha Volunteers International (MVI).

El pastor Gabriel Paulino, presidente de la Asociación Dominicana del Sureste, dijo que fue una gran oportunidad de trabajo reunir a 35 pastores de las iglesias locales, que representaron la mitad del equipo pastoral de la asociación, para levantar las paredes del tan necesario templo.

“Esta es la primera iniciativa de su clase que involucra a nuestros pastores, y agradecemos a los líderes de Maranatha por todo el apoyo que nos han dado en la construcción de iglesias aquí en nuestra región”, dijo Paulino. “Nuestro interés fue que los pastores tengan la experiencia de trabajar en equipo como voluntarios de Maranatha, para que experimenten la alegría y la satisfacción de construir con sus propias manos una casa de adoración para Dios”, dijo Paulino. “Implicó involucrar a nuestros pastores para que aprendan el valor de la fidelidad de nuestros miembros que devuelven sus diezmos y ofrendas, para que la obra de Dios pueda prosperar, y para que nosotros como ministros podamos sustentar a nuestras familias”, explicó.

Participación de todos los pastores locales

La iniciativa es parte de la tarea de involucrar a todos los 71 pastores locales de la Asociación Dominicana del Sureste, para que participen en un viaje misionero de construcción. El resto de los 36 pastores de iglesia participará de la construcción de una nueva iglesia en la comunidad de El Guanito durante una semana de agosto.

La nueva iglesia mide 6,70 por 15 metros e incluye espacio para cien personas, un bautisterio, un vestíbulo, dos baños, una sala de niños y una oficina para el pastor, informó. Maranatha se asegura de que la iglesia esté construida con concreto y paredes de cemento, techo de aluminio con instalación solar y de sonido, ventanas, persianas, puertas y ventiladores, y construye un pozo de agua que será usado para beneficiar a la comunidad.

“Maranatha International ha hecho mucho por nuestro país y el mundo, además del apoyo financiero de la División Interamericana y la Unión Dominicana con numerosos proyectos no solo aquí, sino en toda la isla”, dijo Paulino.

Dar el ejemplo

Kenneth Weiss, vicepresidente ejecutivo de Maranatha, dijo que fue la primera vez que una asociación ha involucrado a sus pastores como voluntarios de MVI en dos proyectos de construcción en el mismo año. “Eso es algo que celebramos, y que también motiva a otros campos del mundo para que sigan el mismo ejemplo. La República Dominicana es un lugar muy especial para nosotros [en Maranatha] por los hermosos recuerdos del pasado y el gran crecimiento que ha experimentado la Iglesia Adventista en la isla”, dijo Weiss.

Kyle Fiess, vicepresidente de servicios voluntarios de MVI, dijo que “esta nueva etapa con el regreso de Maranatha Volunteers Internacional en la República Dominicana desde mediados de 2022, la colaboración entre la organización internacional y la Asociación Dominicana del Sureste, ha sido una fuente de inspiración”, expresó. MVI está actualmente al frente de un proyecto con la asociación para construir cuarenta iglesias y una gran escuela primaria y secundaria desde 2022 en la región, que planea terminar para 2025.

Cientos de voluntarios de todo el mundo han colaborado en muchas comunidades de la asociación, no solo trayendo materiales y herramientas, sino también corazones llenos de amor y dedicación, explicó Fiess. “Muchos de esos voluntarios también se involucraron en el impacto comunitario, como por ejemplo con servicios médicos gratuitos, Escuela Bíblica de Vacaciones para los niños, la distribución de alimentos y campañas de evangelismo público, entre otros”.

Una experiencia extraordinaria

Durante toda una semana, del 8 al 15 de junio de 2024, los pastores durmieron en colchones inflables en casas cercanas de los miembros, tuvieron turnos para cocinar para el grupo y trabajaron en el proyecto de construcción. También tuvieron cultos en conjunto.

“Esta ha sido una experiencia extraordinaria, la de trabajar juntos con otros pastores”, dijo el pastor Enmanuel Alberti, quien está al frente de varias congregaciones en la asociación del sureste. “Hemos disfrutado de edificar, comer, adorar, sumergirnos en el río al final del día y compartir nuestra experiencia cada noche”, dijo Alberti. “Esto realmente ha cambiado mi vida”.

William Morillo, quien está al frente de cinco congregaciones, dijo que se sintió entusiasmado de construir una nueva iglesia. “Nunca antes he colocado bloques de cemento y me siento muy feliz y entusiasmado de ser parte de esta maravillosa obra que será una gran bendición para la comunidad”, expresó.

No solo tiene que ver con el trabajo juntos, en el lugar de la construcción, dijo el pastor Juan Blanco, sino también en las oraciones juntos, pasando tiempo devocional juntos, orando por la comunidad y visitando a la comunidad y distribuyéndoles artículos.

“Como pastores, estamos, estamos acostumbrados a estar detrás del púlpito, hacer visitas, visitar los hospitales y otras responsabilidades, pero hemos estado sentados aquí, enfrentando el clima y los mosquitos, pero nos ha dado tanta alegría mezclar cemento y trabajar juntos en algo de lo cual acaso solo veamos los resultados en el cielo”, dijo el pastor Gregorio Morillo. “Me siento tan feliz de haber trabajado con mis manos, con mi corazón, para que las personas puedan hallar refugio en esta nueva iglesia”.

Los pastores distribuyeron canastos de comida por medio de la sede local de la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) durante la semana, repartieron el libro El conflicto de los siglos, de Elena de White, y los invitaron a visitar la iglesia en construcción al día siguiente.

Al final de la semana, el grupo de pastores celebró el culto del sábado el 15 de junio, con 15 miembros nuevos y visitas que continuarán marcando un impacto en la comunidad con el evangelio.

Los líderes dijeron que la nueva iglesia será una bendición para la comunidad de Pilancón, que cuenta con aproximadamente 1.500 habitantes.

El pastor Teófilo Silvestre, presidente de la Unión Dominicana, felicitó a los líderes de la Asociación Dominicana del Sureste y a de Maranatha por su apoyo constante a lo largo de los años, lo que ha contribuido al crecimiento de la iglesia en la República Dominicana.

El artículo original se publicó en el sitio web de la División Interamericana.