“Guardaos de hacer vuestra justicia delante de los hombres, para ser vistos de ellos…” (Mateo 6:1). Aquí, Jesús ataca el núcleo de la naturaleza humana: el deseo de gloriarse a sí mismo.
Cuando realizamos actos de caridad, “Hemos de dar sinceramente, mas no con el fin de alardear de nuestras buenas acciones, sino por amor y simpatía hacia los que sufren,” Escribió Elena de White. “La sinceridad del propósito y la bondad genuina del corazón son los motivos apreciados por el cielo.” (DMJ 70.5)
Al servir, busquemos no glorificarnos a nosotros mismos. Más bien, adoptemos el verdadero motivo del servicio: No a nosotros mismos, sino a Dios y solo a Dios.
Para obtener más información sobre este tema, lee el libro El Discurso Maestro de Jesucristo, de Elena G. de White y descarga tu copia digital en https://egwwritings.org/.