En una hazaña significativa tanto para su alma mater como para su comunidad religiosa, Christopher Niño Duane Mendoza, miembro de la Iglesia Adventista del Séptimo Día y orgulloso graduado de la Facultad de Medicina Matias H. Aznar Memorial (MHAM) de Cebú (Filipinas), ha obtenido la puntuación más alta en el reciente Examen Nacional de Licencia Médica de Filipinas, con un 89,25 %.

El logro de Mendoza es significativo para la comunidad adventista del séptimo día, ya que pone de relieve la excelencia en la educación médica y la preparación profesional que se cultiva en ella. Considera su carrera como una extensión vital del servicio evangélico, y la ve como una vía para proporcionar sanación física esencial a los necesitados.

“Cuando era joven, tenía sentimientos de fracaso. Sin embargo, a medida que fui creciendo, llegué a reconocer el valor inherente de la educación. Veo el aprendizaje como un don precioso, que me capacita para devolver a los demás compartiendo conocimientos y cultivando oportunidades de aprendizaje”, dijo Mendoza.

“He llegado a comprender que, por medio de la devoción diaria y la oración, puedo ayudar a mejorarme a mí mismo. Al rendirme a la voluntad de Dios, he aprendido que él me capacita para cumplir su propósito”, explica Mendoza.

Antes de obtener su título en la Facultad de Medicina Matias H. Aznar Memorial de Cebú, Mendoza pasó sus años de premedicina estudiando tecnología médica en la Universidad del Sudoeste de Cebu de 2014 a 2018. Sin demora, hizo la transición de sus estudios de premedicina para seguir su curso de Medicina unos meses después de graduarse, lo que demuestra su compromiso inquebrantable con su trayectoria educativa.

Mientras cursaba la carrera de Tecnología Médica, Mendoza buscó activamente una institución adecuada para sus futuros estudios de Medicina. A pesar de las numerosas opciones disponibles en su región, eligió el MHAM. Su decisión fue impulsada por el hecho de que la MHAM es una de las dos facultades de Medicina de Cebú que ofrece clases libres del sábado para los adventistas, una prioridad para Mendoza a la hora de elegir su camino educativo.

Para Mendoza, el sábado tiene una profunda importancia. Su madre le inculcó la preciada lección de preservar el sábado como su máxima prioridad, por encima de todas sus necesidades y aspiraciones personales.

“Mi madre me guio con el ejemplo, enseñándome la importancia de honrar el sábado y alimentar nuestra relación con Dios. Esta base me ha servido de guía y motivación para asistir diligentemente a todas mis clases”, narró Mendoza.

Mendoza relató el exigente horario de cuatro a cinco exámenes los viernes para garantizar la observancia del sábado. Normalmente, el estrés y la presión que ello supone limitan a los estudiantes a un máximo de dos exámenes al día. A pesar de estos obstáculos, Mendoza se mantuvo firme y sobresalió en todos sus exámenes a lo largo del curso.

Mendoza comenzará su residencia en noviembre, con objetivos que van más allá de la práctica clínica. Su intención es seguir una carrera docente junto con su residencia. Su objetivo final es especializarse en medicina interna o cirugía general.

“Este regalo que he recibido es algo que no esperaba. El camino hasta donde estoy ahora nunca es fácil, pero ha merecido la pena porque a cada paso he sentido que Dios me guiaba”, afirma Mendoza.

En los últimos años, se ha producido un notable aumento del número de estudiantes adventistas en Filipinas que obtienen las mejores calificaciones en los exámenes nacionales de licenciatura en diversas disciplinas médicas, como Medicina, Enfermería, Tecnología Médica, Fisioterapia y Odontología. Sus “alma maters” adventistas atribuyen esta tendencia a una combinación de factores, como el enriquecimiento espiritual, la meticulosa preparación de los exámenes y el alto nivel de la educación adventista recibida en los niveles universitario y previo.

El artículo original se publicó en el sitio web de la División Sudasiática del Pacífico.