Desentrañar los secretos de la profecía bíblica fue el tema del programa de evangelización del 8 al 15 de abril en Arsenyev, Primorsky Krai, Rusia, dirigido por el Pr. Lev Ivanovich Bondarchuk, presidente de la Unión del Lejano Oriente, y su esposa, Svetlana Vladimirovna.
La congregación local llevaba más de un año preparando el acontecimiento. Durante la víspera, celebraron una maratón de oración.
Los miembros de la iglesia colocaron pancartas de invitación por toda la ciudad e invitaron a sus familiares, amigos y conocidos. La congregación también organizó repetidamente acciones sociales para los residentes de la ciudad, ofreciendo servicios de peluquería a quien lo deseara y celebrando diversas reuniones temáticas en un ambiente amistoso tomando una taza de té. Poco antes del programa, la congregación empezó a dar clases de Biblia los domingos.
La iglesia oraba fervientemente por todas las personas que acudían a la casa de oración. Los hermanos y las hermanas de la congregación de Arsenyev esperaban el programa con especial emoción y temblor; entonces llegó el día tan esperado. Desde el primer día, nuevas personas acudieron al programa, y muchas de ellas no faltaron ni un solo día. Estaban muy interesados y preocupados por el sábado, si hay vida después de la muerte, qué significa el sello de Dios y si hay esperanza para este mundo.
Un agradecimiento especial a Vladimirovna por sus maravillosas sesiones de “¡Hablemos de lo bello!”. Cada noche, al comienzo de la reunión, hablaba con todos los presentes sobre las cualidades internas del alma humana que hacen que cada persona sea especialmente bella, porque la belleza sin bondad, amor, alegría, humildad, amabilidad y fe muere sin realizarse.
El último día del programa hubo un bautismo. Tres personas hicieron un pacto con el Señor. De ellas, dos eran personas nuevas, y una mujer decidió renovar su pacto con Dios. Nueve personas nuevas asistieron al programa, y algunas de ellas se interesaron por la verdad y expresaron su deseo de estudiar la Biblia. Los hermanos y las hermanas de esta pequeña congregación dedicaron mucho tiempo y esfuerzo a preparar este proyecto de evangelización. Hoy están muy contentos y agradecidos al Señor por el programa en su ciudad y por las nuevas personas con las que estudiarán la Palabra de Dios.
La versión original de esta noticia se publicó en el sitio de noticias en ruso de la División Euroasiática.