Se recomendó la formación de una nueva sede administrativa para atender las fronteras de Myanmar y Tailandia, a fin de apoyar la iniciativa de Mission Refocus [Reenfoque en la misión] de la Iglesia Adventista. La decisión fue tomada en la reciente reunión de mitad de año de la Junta Directiva de la División Sudasiática del Pacífico (DSAP), que se celebró los días 2 y 3 de mayo de 2023 en el Centro de Impacto Esperanza de Vida de Silang, Cavite, Filipinas.

La Unión del Sudeste Asiático en Tailandia estará a cargo de la Región Adjunta Myanmar–Tailandia. La Región Adjunta Myanmar–Tailandia se creó para dar cabida a la creciente población entre las fronteras de Myanmar y Tailandia y atender a las crecientes necesidades de las familias y las personas situadas en esta difícil zona.

La creación de la nueva zona forma parte de los esfuerzos de la Iglesia por racionalizar su estructura administrativa y concentrarse más en su propósito de difundir el Evangelio. Se supone que la nueva región ayudará a organizar mejor los esfuerzos de la iglesia en estas fronteras y a descubrir estrategias para impulsar la misión en este lugar.

La zona fronteriza entre Tailandia y Myanmar se considera un lugar difícil debido a los continuos disturbios políticos y los desplazamientos generalizados. Miles de personas se han visto desplazadas como consecuencia de los conflictos fronterizos entre el gobierno y los grupos étnicos minoritarios.

Muchas de las familias desplazadas no son refugiadas y, por tanto, no tienen acceso a atención sanitaria, educación o protección legal, lo que complica aún más la situación. Muchas familias viven hacinadas y en condiciones de suciedad, con escasez de alimentos, abrigo o agua, lo que da lugar a una calamidad humanitaria.

Dadas estas dificultades, se anima a la Iglesia Adventista del Séptimo Día a establecer una presencia en la zona para ayudar a las familias desplazadas. La iglesia trata de ofrecer esperanza, consuelo y ayuda práctica a los necesitados, a la vez que difunde el amor y la compasión de Dios.

La misión fronteriza de la iglesia se centra en enseñar y ayudar a los niños y familias desplazados por el conflicto. Esto incluye la gestión de escuelas y programas educativos que ayudan a los estudiantes a continuar sus estudios y adquirir habilidades para la vida, así como dar alimentos, refugio y tratamiento médico a los necesitados.

Al establecer una presencia en la frontera, la Iglesia Adventista espera trabajar con las comunidades locales y las organizaciones no gubernamentales (ONG) para ayudar a las familias desplazadas y a los más vulnerables. Alivia el sufrimiento, promueve la paz y salvaguarda los derechos humanos fundamentales de todos.

“Creemos que esta medida permitirá una mayor unidad, eficiencia y eficacia de la misión, así como un uso más efectivo de los recursos y el personal”, declaró el Pr. Roger Caderma, presidente de la División Sudasiática del Pacífico.

El establecimiento de la Región Adjunta de Myanmar–Tailandia también se considera una respuesta a la cambiante situación geopolítica de la región, que ha obligado a la iglesia a reposicionarse estratégicamente.

“Vivimos en un mundo que cambia rápidamente y debemos ser adaptables y flexibles para cumplir nuestra misión lo mejor posible”, declaró el Pr. Caderma.

La decisión de establecer la nueva área se tomó siguiendo el consejo de la Comisión de Estudio del Estatus de la Asociación/Misión en su reunión del 9 de marzo de 2023.

La Iglesia Adventista del Séptimo Día tiene una larga historia de actividad misionera en Myanmar y Tailandia, y el establecimiento de la Región Adjunta Myanmar–Tailandia se considera un paso adelante en el fortalecimiento de la presencia y el impacto de la iglesia en la región.

La versión original de esta noticia se publicó en el sitio web de la División Sudasiática del Pacífico.