La Iglesia Adventista de la región del sur de Asia y del Pacífico participó en la celebración anual del Día Mundial de la Juventud, que tiene lugar simultáneamente en todo el mundo. El evento de este año, denominado “El amor es un verbo”, es un llamado a la acción para que los jóvenes tengan un impacto positivo en sus comunidades y en el mundo.
El Día Mundial de la Juventud es un acontecimiento único, en el que jóvenes de todo el mundo se reúnen para servir a sus comunidades y difundir el amor y la bondad. El evento no se limita a los jóvenes adventistas, sino que está abierto a cualquier persona que quiera marcar la diferencia en el mundo.
“El lema ‘El amor es un verbo’ hace hincapié en la necesidad de poner el amor en acción. No basta con hablar de amor o expresar tus sentimientos por alguien o algo. El amor requiere acción. Nos pide que salgamos de nuestra zona de confort y hagamos algo para servir a los demás”, declaró el Pr. Ron Genebago, director del Ministerio Joven de la División Sudasiática del Pacífico (DSAP).
Los jóvenes que participaron en el Día Mundial de la Juventud pudieron realizar una serie de actividades de servicio, como dar de comer a los sin techo, visitar a los ancianos, limpiar el medio ambiente y mucho más. El objetivo es generar un impacto real en la vida de las personas necesitadas.
“El futuro de la iglesia está en buenas manos. Estamos formando miembros (jóvenes) solidarios que sienten empatía por la difícil situación de los seres humanos. La iglesia se está convirtiendo en una institución atractiva para un mundo que necesita paz verdadera y amor genuino”, dijo el Dr. Pako Edson Mokgwane, director asociado del Ministerio Joven de la Iglesia Adventista mundial. “Cuando el amor es una acción, lo que profesamos más lo que hacemos engendra autenticidad, una moneda que ayudará a ganar más jóvenes para Jesús. Mediante la iglesia, Dios está levantando un poderoso ejército de jóvenes que terminarán la obra. Por eso, el Día Mundial de la Juventud no debe ser un acontecimiento, sino un estilo de vida”.
El Día Mundial de la Juventud también permite a los jóvenes relacionarse entre sí. Jóvenes de muchas culturas y orígenes pueden trabajar juntos para lograr un objetivo común, fomentando un sentimiento de unión y propósito.
En el centro de Filipinas, la Voz de la Juventud (VJ) Imparable de Negros Occidental llevó a 260 jóvenes a Jesús durante la celebración del Día Mundial de la Juventud 2023.
Según una publicación de Facebook, los jóvenes del centro de Filipinas organizaron más de 300 centros del Día Mundial de la Juventud, con el objetivo de contribuir al cumplimiento de la comisión evangélica, compartiendo el mensaje de amor y salvación con sus compañeros de la zona. El programa VJ Imparable es un esfuerzo dirigido por jóvenes de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en la zona del sur de Asia y el Pacífico que busca hacer participar y capacitar a los jóvenes para que compartan su fe con los demás.
El lema del Día Mundial de la Juventud 2023 fue “El amor es un verbo”, y la iniciativa la Voz de la Juventud Imparable de Negros Occidental se lo tomó muy en serio, llevando activamente a sus compañeros a Jesús. Organizaron diversas actividades, como servicio comunitario, seminarios de salud y reuniones de evangelización para llegar a los demás.
“Creo que llevar a los jóvenes a Jesús es una de las mejores expresiones de la frase ‘El amor es un verbo’ ”, dijo el Pr. Von John Sánchez, director de Jóvenes Adventistas en el centro de Filipinas.
Los esfuerzos del grupo se vieron recompensados cuando pudieron llevar a más de 200 jóvenes a tomar una decisión por Jesús. El evento del DMJ fue un momento de alegría y celebración, ya que los jóvenes experimentaron el poder transformador de Dios. El 19 de marzo de 2023, algunos jóvenes tuvieron una continuación de su programa del DMJ al organizar una campaña de donación de sangre para la comunidad.
La Iglesia Adventista del Séptimo Día cree que los jóvenes tienen una responsabilidad especial para mejorar el mundo. Al participar en el Día Mundial de la Juventud, los jóvenes pueden mejorar sus habilidades de liderazgo, cultivar un corazón de servicio y ejercer un efecto positivo en sus comunidades.
El Día Mundial de la Juventud es un acontecimiento apasionante que reúne a jóvenes de todo el mundo para marcar la diferencia en sus comunidades. El lema “El amor es un verbo” recuerda a la iglesia en general que el amor requiere acción y que debe estar dispuesta a ir más allá de su zona de confort para servir a los demás. Los jóvenes que participan en actividades de servicio no solamente marcan la diferencia en la vida de aquellos a quienes sirven, sino que también desarrollan sus habilidades de liderazgo y profundizan su fe.
La versión original de esta noticia se publicó en el sitio web de la División Sudasiática del Pacífico.