La Iglesia Adventista del Norte de Filipinas reconoció a dos de sus instituciones adventistas de educación superior, la Universidad Adventista de Filipinas (UAF) y el Colegio Adventista de Manila (CAM), por sus logros en el Examen de Licencia de Técnico en Medicina de marzo de 2024. La UAF se aseguró la sexta posición entre los centros con mejores resultados, mientras que el CAM obtuvo un sobresaliente índice de aprobados del 100 %.

En el sur de Filipinas, el Colegio de Mountain View (CMV) también demostró un notable rendimiento en el examen, logrando una tasa de aprobados del 82,3 %, con 56 aprobados de los 68 examinados.

Además, Pittzman Jo R. Acosta, graduado de la UAF, ocupó el séptimo lugar entre los 9.068 examinados de la región.

Al reflexionar en su experiencia académica, Acosta, graduado Summa cum laude, contó que en un momento de la pandemia, “el pesimismo nubló su mente”. Se aisló, se enterró en el estudio y se sintió inseguro al ver que sus compañeros se divertían. Cuando se reanudaron las clases presenciales, escuchar las historias de sus compañeros le sirvió como recordatorio divino de que no estaba solo y de que “todos estaban recorriendo el mismo camino”.

Acosta también atribuyó la superación de la negatividad a los programas integrales de la UAF que, en su opinión, diferencian a la educación adventista. Al describir a sus profesores, dijo: “Son un ejército de personas temerosas de Dios que nos inspiraron a dar lo mejor de nosotros mismos. Vincularon la fe a la asignatura, lo que cultivaba en nosotros un aprecio más profundo de Dios”.

Al compartir algunas lecciones aprendidas, Acosta subrayó la importancia de la comunidad. “Rodéate de buenos amigos. Sé testigo del testimonio de otras personas. Sus historias y sus experiencias vitales pueden ser justo lo que necesitas para salir adelante”. Para terminar, dijo: “Si aspiras a lo mejor, hazlo. Pero al hacerlo, hazlo bien. Hazlo con justicia. Hazlo con Dios”.

Yanna Yvonne Macayan, directora del departamento de Ciencias de Laboratorio Médico (CLM) de la UAF, describió a Acosta como “un estudiante que demostró constantemente diligencia en clase”. Y añadió: “Una de sus cualidades más admirables es su preocupación por los demás. En lugar de optar por un proyecto más fácil para nuestra clase de salud pública y comunitaria, superó las expectativas colaborando con el barangay para organizar una actividad a gran escala”.

La Dra. Lalaine Alfanoso, directora del departamento del Ministerio de la Salud de la División Sudasiática del Pacífico, felicita a todas las personas que participaron del examen y subraya el gran esfuerzo necesario para superarlo. “El examen ha sido un desafío, y la dedicación y la perseverancia de ustedes han dado ahora resultados fructíferos”, señaló la Dra. Alfanoso.

Y añadió: “Extendemos nuestras más sinceras felicitaciones a todos los examinados. El compromiso de ustedes con la salud y la vida ejemplifica el brillante futuro del Ministerio de la Salud en Filipinas, a medida que siguen influyendo positivamente en las vidas de todo el mundo”.

La UAF se encuentra entre las mejores instituciones educativas del país, ocupando el sexto lugar entre 145 instituciones de todo el país. De sus 59 graduados, 58 aprobaron con éxito, alcanzando una tasa de éxito del 98,31 %. Como univerisdad pionera de la Licenciatura en Tecnología Médica en Filipinas, la UAF sobresale constantemente en los exámenes de la junta. La Iglesia Adventista dirige la UAF, una institución autónoma de nivel IV, que es un internado terciario en Silang, Cavite.

Por su parte, el Colegio Adventista de Manila también celebró el éxito de sus candidatos al examen, que obtuvieron un índice de aprobados del 100 %. Con solamente 6 años de funcionamiento, este es el tercer examen de su programa de Licenciatura en Ciencias de Laboratorio Médico (LCLM).

Al preguntarle por la estrategia de preparación empleada para los exámenes, Jovy Acopio, decano de la Escuela de Salud Aliada, destacó la importancia de la oración. “Nuestro secreto es la oración ferviente. No es una oración superficial, sino una oración de fe, creyendo que Dios es fiel y cumplirá sus promesas a su tiempo y a su manera”. Acopio recordó su súplica a Dios, diciendo: “Señor, has sido tan bueno con nuestras instituciones hermanas; confío en que también harás lo mismo con nosotros y nos darás resultados al cien por cien, todo por tu gloria. Es tu nombre el que está en juego. Esta institución educativa está en la ciudad. Que tu nombre sea exaltado en la ciudad en medio de la presencia de destacadas universidades”.

Además, el departamento se comprometió activamente con los candidatos, proporcionándoles apoyo individual para aliviar sus ansiedades y aumentar su confianza. Los profesores compartieron experiencias personales acerca de cómo Dios los ayudó a superar los desafíos de la vida. Todo ello contribuyó a elevar el ánimo y la moral de los candidatos.

La universidad atribuyó el logro a la dedicación de los aprobados de la LCLM, que estudiaron diligentemente para preparar los exámenes, y a todo el profesorado de la LCLM, bajo la dirección de Jeramie Galapon, por sus incansables esfuerzos en la tutoría de los estudiantes. Al reflexionar en el resultado, Jovy solo pudo exclamar: “La oración funciona. Dios es increíble. El Señor al que oramos escucha, responde y es fiel”.

Este artículo fue facilitado por la División Sudasiática del Pacífico.