En el pequeño pueblo de Dishnicë (Albania), de mayoría musulmana, se está llevando a cabo un proyecto transformador de plantación de iglesias. En octubre de 2023, miembros jóvenes de la cercana iglesia adventista Korçë, a solo 10 km de distancia, comenzaron su sentida misión de “Paquetes de Esperanza” para apoyar a 27 familias que enfrentan dificultades financieras.

La obra comenzó en Dishnicë en diciembre de 2022 con un programa de servicio y evangelización, recibiendo a jóvenes todos los domingos para una variedad de actividades atractivas. Entre ellas, canciones, deportes, narración de historias y lecciones interactivas de historias bíblicas. Anxhela Lakollari, responsable del proyecto, recuerda: “Tras comprobar el impacto de nuestro programa infantil, identificamos otras necesidades en la comunidad. Mediante encuestas, identificamos a las familias que necesitaban ayuda y empezamos a distribuir paquetes mensuales de alimentos”. Pero, tal como sigue explicando Lakolloari, los líderes no se detuvieron ahí. “Ampliamos nuestro alcance para incluir sesiones educativas para adultos, abordando temas relacionados con la salud y la adicción, entrelazados con enseñanzas espirituales”.

Estos esfuerzos humanitarios de base se han convertido ahora en una iniciativa de plantación de iglesias. Adriel Henke, pastor de la Iglesia Adventista Korçë, explica el enfoque: “Intentamos imitar el método de Jesús de mezclarse con la gente, demostrar compasión, satisfacer sus necesidades y ganarse su confianza antes de invitarles a ‘seguir a Jesús’. En el corazón de nuestra misión está Nuestra misión: compromiso genuino, fomentar la confianza y vivir las enseñanzas de Jesús”.

Más allá de las distribuciones mensuales de alimentos, los seminarios semanales atienden a diversos grupos de la aldea. Fatjon File, otro de los responsables del proyecto, destaca el carácter Integral de su enfoque: “Nuestras sesiones abarcan una serie de temas para niños, adolescentes, jóvenes, mujeres y hombres, con el objetivo de abordar no solamente las necesidades físicas, sino también el bienestar emocional e intelectual”.

Aunque no todo el mundo es inmediatamente receptivo al Evangelio, Fatjon señala: “Esto nos hace a mi esposa Anxhela y a mí más fuertes en Dios, porque hemos visto la mano de Dios obrando en nosotros como pareja y en el trabajo que estamos haciendo en Dishnicë”.

“Cuando seguimos el ejemplo de Jesús, de servir y amar a la comunidad que nos rodea, no solo nos convertimos en una bendición para ellos, sino que también nos sentimos bendecidos”, señaló Delmar Reis, presidente de la Misión Albanesa. “Cumplimos nuestra misión cuando salimos de nuestra zona de confort, más allá de los muros de la iglesia, y somos testigos del amor de Dios en acción”.

El artículo original se publicó en el sitio web de la División Transeuropea.