La Iglesia Adventista acoge una convención interreligiosa en el norte de Filipinas, fomentando la unidad para lograr un impacto positivo en la comunidad

Southern Asia-Pacific Division

La Iglesia Adventista acoge una convención interreligiosa en el norte de Filipinas, fomentando la unidad para lograr un impacto positivo en la comunidad

Las presentaciones acerca de la vida espiritual y pastoral inspiraron y equiparon a más de 50 pastores para un ministerio eficaz.

Pastores de varias denominaciones cristianas se reunieron en la sede de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en San Pablo City, Filipinas, para el Proyecto PREACH de “Llegar a cada pastor en casa”. Con asistentes de las provincias de Batangas, Laguna y Quezón, un total de 56 participantes se unieron al evento, cuyo lema fue “Alimenta mis corderos”. El objetivo principal era forjar relaciones positivas con los pastores y compartir ideas para servir mejor a sus congregaciones, alimentando sus facultades.

ALIMENTA MIS CORDEROS

Las presentaciones abarcaron una amplia gama de áreas vitales para la vida y el ministerio de los pastores, como la salud física y mental, la música, la familia, la congregación y el crecimiento espiritual personal. Todos los ponentes procedían de la Unión Filipina del Norte (UFN), la oficina principal de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en Luzón.

La Dra. Jade Hintay, directora del Ministerio de la Salud, abordó el tema crucial del mantenimiento de la salud física mediante una dieta adecuada, citando las preocupantes tasas de obesidad e hipertensión entre los pastores. Destacando la relación de una dieta sana con el bienestar mental, social, físico y espiritual, subrayó la importancia de una dieta equilibrada.

A continuación, la Dra. Josie-Felda Calera, directora del Ministerio de la Música, habló de la importancia de alimentar el alma con música, describiéndola como relajante y edificante, que promueve el bienestar físico y mental. Además, la Dra. Ardie Díaz profundizó en la necesidad de alimentar la mente con sustento espiritual. Afirmó: “Lo que des de alimento a tu mente determinará la salud de tu estado emocional y espiritual; te consumirá o te llenará. Alimentar la mente con la verdad de Dios te mantendrá fuerte”.

Delba de Chávez, directora del Ministerio de la Familia, subrayó la importancia del culto familiar en su presentación. Hizo hincapié en que los hogares enriquecidos espiritualmente dan prioridad a las interacciones de fe, incluyendo el culto familiar, la oración y la lectura de la Biblia. Destacó, además, que la tecnología moderna a menudo interrumpe la unión familiar, señalando: “Los teléfonos se han convertido en una adición no deseada a la mesa de la cena”.

Destacando el alimento espiritual de las congregaciones, el pastor José Orbe, Jr. destacó tres razones para nutrir la iglesia: revigorizar, reponer y reproducir. Dijo: “Cuando no conseguimos llevar al rebaño a la fe en Dios, tienen hambre. Siguen comiendo, pero siguen hambrientos. Siguen bebiendo, pero siguen sedientos. ¿Qué debemos darles de comer? A Cristo. ¿Cómo los alimentaremos? Llevándolos a la fe en Cristo; Cristo los saciará. Cristo es suficiente. Y cuando Cristo les baste, nada les faltará”. Profundizando en el tema del crecimiento de la iglesia, el pastor Orbe explicó: “El crecimiento es un resultado natural de ser alimentados en Cristo. La iglesia debe ser alimentada no solamente con comida blanda o tentempiés o una dieta de muestra, sino con un banquete sustancioso centrado en el Salvador. Cuando predicamos desde el púlpito, Cristo debe ser el punto focal”.

El pastor Marvin Díaz, secretario ministerial, concluyó la sesión con el tema “Alimentando al pastor con dieta bíblica”. Él enfatizó: “Cuando las ovejas están bien alimentadas, la leche es buena”. Animó a los pastores a dar prioridad al estudio de la Palabra de Dios, afirmando: “La verdadera felicidad únicamente llega mediante la Palabra de Dios. La Palabra de Dios nos santifica. Debemos tener encuentros con la Palabra de Dios. La Biblia no es simplemente una herramienta para predicar; es para la transformación de nuestras vidas”.

COMENTARIOS Y REFLEXIONES

En una expresión de deleite, el Rev. Nestor P. delos Santos, delegado de la Iglesia del Fuego Refinador de Jesucristo, exclamó: “Aquí todo es piadoso. Podemos sentir la presencia de Dios. La presencia de Dios está con ustedes. Estamos ansiosos por replicar las buenas prácticas, metodologías y enseñanzas de ustedes y cómo viven como cristianos”.

El pastor principal, el reverendo Arcangel Santonia, de La Luz del Mundo, expresó su sincera gratitud por la oportunidad de confraternizar con pastores adventistas. Afirmó: “Esta reunión demuestra que, aunque pertenecemos a diferentes organizaciones, estamos unidos en un solo Espíritu y un solo Dios”. Se mostró agradecido por las profundas presentaciones, que abarcaron aspectos vitales de la vida y el ministerio de un pastor. Continuó: “Una cosa de la que nos hemos dado cuenta es que no tenemos el monopolio del conocimiento; tenemos mucho que aprender de ustedes, y quizá vosotros también tengan algo que aprender de ustedes. Concluyó, diciendo: “Que nuestra relación continúe hasta la venida del Señor Jesucristo”.

En sus palabras de clausura, el pastor Jasper Flores, presidente de la Asociación de Luzón Centro-Sur (ALCS), extendió su agradecimiento a todos los pastores asistentes. “Es una gran alegría estar con nuestros colegas pastores. Es nuestra intención intercambiar las mejores prácticas y aprender unos de otros para enriquecer nuestros ministerios”.

FORJANDO VÍNCULOS

El pastor Israel Andoy, quIEN contribuyó a invitar a la mayoría de los pastores y ministros presentes, no hace más que alabar a Dios por el éxito de la reunión. Como secretario ministerial jubilado de la UFN, lleva mucho tiempo con el ferviente deseo de relacionarse con sus colegas pastores, especialmente con los de otras denominaciones. No podía ignorar las instrucciones de los inspirados escritos de Elena de White de manifestar un profundo y ferviente interés por el bienestar de los pastores de otras denominaciones y orar por ellos. Tras su jubilación, se comprometió a colaborar con organizaciones de ministros y a entablar amistades genuinas con pastores de otras denominaciones. Dijo: “Sin palabras duras, sin debates, solo rompiendo los muros y haciendo amistad con ellos”. Expresó su satisfacción por el hecho de que 34 de los presentes volvieran a asistir al seminario PREACH del año pasado.

Los pastores no se fueron a casa con las manos vacías, gracias a la iniciativa del Departamento Ministerial de regalar libros a todos los participantes. Muchos expresaron también su entusiasmo ante la perspectiva de celebrar un encuentro de pastores de otras confesiones en toda la Unión.

Este artículo se publicó en el sitio de noticias de la División Sudasiática del Pacífico.