La Iglesia Adventista del Séptimo Día de Kellyville, situada en Sídney, Nueva Gales del Sur, celebró su 130° aniversario el 20 de mayo de 2023, reuniendo a miembros pasados y presentes para honrar su larga historia y su compromiso con la misión.
Al reflexionar en este hito, el pastor Martin Vukmanic expresó su admiración por la trayectoria de la congregación. “Este es nuestro cuarto edificio, pero todas nuestras iglesias han estado conectadas por el amor a Dios, el deseo de compartir su mensaje y el compromiso de servir a nuestra comunidad. Nuestros miembros siempre han estado dispuestos a dar su tiempo y sus dones para edificar la iglesia”, dijo.
El pastor Michael Worker, secretario de la Unión Australiana, fue el orador invitado a la celebración. Habló del duro trabajo y la firme fe de los miembros de la iglesia de Kellyville. “El lema del día fue ‘Fieles entonces, fieles ahora’, que es un testimonio del coraje y la tenacidad de los miembros de la Iglesia de Kellyville durante los últimos 130 años”, dijo el pastor Worker.
“La reubicación más reciente de la iglesia fue para seguir su sentido del llamado a la misión de ubicarse junto al entonces nuevo campus de Kellyville del Colegio Adventista de Hills. La iglesia pasó de una relativa comodidad en unas instalaciones que estaban totalmente pagadas a asumir un enorme proyecto de construcción”, dijo.
Según el pastor Worker, este audaz paso llevó a la congregación a contraer una deuda significativa para reforzar su compromiso con esta asociación entre la iglesia y la escuela. “Alabado sea Dios porque el día del 130° aniversario pudieron recaudar el resto de los fondos para pagar totalmente sus nuevas instalaciones”, añadió.
La iglesia de Kellyville, una de las congregaciones adventistas más antiguas de Australia, comenzó humildemente con una actividad de evangelización en una tienda de campaña el 10 de febrero de 1893, a la que asistieron 26 personas. La actividad misionera, dirigida por Robert Hare y David Steed, cautivó a su público con verdades bíblicas, y el 24 de junio de 1893 ya se había construido una pequeña iglesia. Los nuevos conversos aportaron el terreno, la mano de obra y las 90 libras esterlinas (180 dólares australianos, unos 117 dólares estadounidenses) para los materiales de construcción y las sillas.
En los años transcurridos desde que Kellyville pasó de ser un pequeño pueblo en las afueras de Sydney a un próspero y moderno suburbio, la iglesia se ha adaptado continuamente para seguir siendo relevante para su comunidad local. El pastor Worker explicó: “Qué enorme desafío para cada una de nuestras iglesias seguir buscando la conducción de Dios, adaptarse a una comunidad local que cambia rápidamente y buscar formas de ministrar de manera significativa a su comunidad local”.
La versión original de esta noticia se publicó en el sitio web de Adventist Record.