El 17 de abril de 2024 quedará marcado para siempre en la historia del Hospital Adventista de Pênfigo (HAP). En esa fecha, se publicó en el Diario Oficial de la Unión la ordenanza número 1605, que otorga al HAP la habilitación para ser la primera institución de salud de Mato Grosso do Sul, Brasil, en realizar trasplantes de hígado.
La publicación se produjo después de la visita de representantes del Ministerio de Salud de la región, que estuvieron en el hospital en marzo, y en esa ocasión firmaron el documento que garantiza la idoneidad de la Unidad Principal de la institución, acreditada en el Sistema Único de Salud (SUS), para realizar procedimientos quirúrgicos.
Conocido en Mato Grosso do Sul por ser referencia en ortopedia, el HAP también se propuso atender a una parte significativa de la población del estado que espera ansiosamente un trasplante de hígado. Para ello, en 2021, el hospital inició el proceso de documentación y adecuación de la estructura física para cumplir con todos los requisitos recomendados por el Ministerio de Salud para la realización de trasplantes.
La noticia positiva llegó precisamente en el mes previo a la celebración del 75 aniversario de la institución.
Con la implementación del Centro de Trasplantes, el HAP pasará de la lista de hospitales que solo realizan procedimientos de baja y mediana complejidad a la de instituciones que realizan cirugías de alta complejidad. Everton Martin, director general del HAP, ve el cambio con optimismo. “Este es un paso más en el campo de la medicina que apunta a alcanzar nuevas metas”.
En 2022, el HAP se convirtió en un centro de detección de pacientes con enfermedades hepáticas en Mato Grosso do Sul mediante la atención ambulatoria y la hospitalización de personas con indicación de trasplante. Sin embargo, estos pacientes tratados por el HAP realizan cirugías en Sorocaba, municipio del interior de São Paulo, Brasil.
La persona que sigue la evolución de estos candidatos es el cirujano Gustavo Rapassi. Jefe del equipo que trabajará en los trasplantes, Rapassi explicó que “muchos pacientes acaban muriendo en el camino porque no pueden soportar el viaje hasta Sorocaba, de ahí la importancia de tratarlos aquí, en Campo Grande”. El especialista también destacó que ahora existe la expectativa de realizar por lo menos 69 cirugías hepáticas por año en la región.
Esperanza para los pacientes
Dayana Ferreira, de 20 años, está en la lista de pacientes que esperan ansiosamente el llamado para recibir un nuevo órgano. Diagnosticada en la infancia con hepatitis crónica autoinmune, la joven tuvo que aprender desde muy pequeña a enfrentarse a los retos de la enfermedad. Hace seis meses, a Ferreira le recomendaron un trasplante y desde entonces mantiene viva la esperanza de una nueva vida. “Si he llegado hasta aquí, ¿por qué no puedo llegar más lejos? Y con el trasplante será un nuevo comienzo”.
Para que el sueño de Ferreira y el de tantos otros pacientes de Mato Grosso do Sul se haga realidad, aún es necesario firmar un contrato con el Municipio de Mato Grosso do Sul. Tras este proceso, todos los pacientes asignados a listas de espera de trasplantes de otros estados pasarán a formar parte de la lista de espera del propio estado, además de poder realizar la cirugía cerca de casa. “Creo que ayudará mucho, sobre todo en la recuperación, saber que estaremos cerca de casa y que la familia estará cerca”, declaró Ferreira.
El artículo original se publicó en el sitio web en portugués de la División Sudamericana.