Ayudar a los demás fue una dimensión no negociable del Camporí Internacional de Conquistadores 2024, y el Servicio Comunitario Adventista (SCA) apoyó muchos de los proyectos filantrópicos que ya estaban en marcha en Gillette, Wyoming, Estados Unidos.
Dos proyectos concretos del SCA estaban en cierto modo relacionados, aunque no lo pareciera: los kits de higiene y los cajones de cultivo. Bo Gendke, director del SCA para la Asociación de Texas y la Unión del Suroeste, ofreció valiosas ideas, centrándose principalmente en los kits de higiene.
“Tenemos varias organizaciones que trabajan con albergues para personas sin hogar o albergues para jóvenes. Decidimos que los Conquistadores nos ayudaran a preparar estos kits de higiene: champú, gel de baño, cepillos de dientes, pasta de dientes, un peine, una maquinilla de afeitar, crema de afeitar y una toalla”, dijo Gendke. “Algunos no usan todos los productos, pero intentamos asegurarnos de que podemos cubrir a todos los que están allí”.
Los Conquistadores demostraron durante toda la semana del Camporí, y durante muchos años y décadas antes, que tienen un corazón genuino para servir a los necesitados. También hubo interés en lograr especialidades específicas asociadas con diversos esfuerzos de servicio a la comunidad. “La especialidad de servir a los demás mediante el SCA es una de ellas”, dijo Gendke, “y la otra es la especialidad de carpintería en la que [los participantes de la caja de cultivo están] trabajando”.
Según Gendke, las discusiones relacionadas con ambas ideas fueron paralelas y comenzaron el verano pasado. En cuanto a la carpintería, "inicialmente íbamos a hacer casitas, pero intentar encontrar dónde podríamos distribuirlas en la comunidad fue un poco más difícil", dijo, "así que los huertos sobre el suelo resultaron ser un proyecto mejor que podíamos hacer para ayudar a la comunidad. Llevamos un año manteniendo conversaciones mensuales sobre cómo y qué haríamos".
El equipo se fijó un ambicioso objetivo de 7.000 kits, muchos de los cuales quedaron en la zona. "Tenemos unos 3.000, creo, que se quedarán en Gillette, y el resto irán a conferencias específicas que los han solicitado para diferentes ministerios", dijo Gendke. En el momento de la entrevista, ya estaban cerca de los 7.000, lo cual es notable, teniendo en cuenta los retrasos causados por la fuerte tormenta de unas noches antes.
Fuerte apoyo
Gendke indicó que Cathy Kissner, directora del SCA para la Asociación de las Montañas Rocosas y la Unión de Mid-America, contribuyó de forma significativa a estos esfuerzos conjuntos; también lo hizo Walter Harris, director del SCA para la Asociación del Gran Nueva York. Harris ofreció más detalles sobre los cajones de cultivo. Mencionó su colaboración con W. Derrick Lea, director del SCA de la División Norteamericana (DNA), que patrocinó tanto el servicio agrícola como los kits de higiene.
Harris explicó que las conversaciones comenzaron hace aproximadamente seis meses. "Hablando con uno de nuestros socios en la respuesta a catástrofes de la zona, el Ejército de Salvación, nos dijeron que querían llevar a cabo un proyecto, pero que no disponían de los recursos humanos o financieros para hacerlo realidad. Así que nos pusimos manos a la obra".
Los cajones de cultivo son estructuras de madera cerradas donde la gente puede establecer huertos personales. Esto abre la puerta a la gente, principalmente a los ancianos, a emprender el camino de la autosuficiencia, especialmente a medida que la asequibilidad de los alimentos se hace cada vez más difícil.
Los cajones miden metro y medio por metro y medio, y tiene cuatro patas de un metro, por lo que mide un metro de alto, lo que resulta ergonómico para la mayoría de los usuarios. Según Harris, estas dimensiones y otros detalles se ajustaron a los parámetros de los recursos financieros y de otro tipo disponibles.
Al igual que Gendke, Harris destacó la participación de los jóvenes Conquistadores y su afán no solamente por ayudar a los necesitados, sino también por aprender una habilidad tan valiosa como la carpintería. Dada la complejidad de la construcción y la brevedad del tiempo, el objetivo establecido fue de 25 unidades. Todos ellos se distribuyeron en la comunidad de Gillette.
Los kits de higiene y los cajones de cultivo son dos remiendos en la colcha brillante, hermosa y de diversos colores de la benevolencia de los Conquistadores ejercida en Camporí.
El artículo original se publicó en el sitio web de la División Norteamericana.