El Hospital Adventista de Sídney (San) ha sido reconocido por su alto nivel de atención a casos de accidente cerebrovascular. Es uno de los 19 únicos hospitales australianos que han recibido la certificación oficial de unidad de infarto cerebral de la Coalición Australiana contra el Accidente Cerebrovascular (CAAC).
El programa de certificación de unidades de accidente cerebrovascular de la CAAC anima a los hospitales a cumplir una serie de criterios nacionales para ofrecer a los pacientes la mejor atención posible. Esto incluye la atención de todos los pacientes de infarto cerebral en una única sala especializada, la dotación de personal especializado, la capacitación periódica, el seguimiento y la mejora de los datos, y la participación de los pacientes en la toma de decisiones.
“Se ha demostrado que el tratamiento en una unidad especializada en accidente cerebrovascular supone la mayor diferencia global de todas las intervenciones en la evolución de los pacientes tras un infarte cerebral, ya que reduce el riesgo tanto de muerte como de discapacidad”, afirma Kelvin Hill, director nacional de tratamiento de accidente cerebrovascular de la Fundación contra el Accidente Cerebrovascular. “Tanto las pruebas australianas como las internacionales sugieren que los programas rigurosos de certificación de centros de accidente cerebrovascular mejoran la calidad de la atención al infarto cerebral y los resultados de los pacientes”, declaró.
“El amplio equipo de neurólogos, residentes de neurología, residentes de neurocirugía, técnicos de neurofisiología, neuropsicólogos y neurocirujanos del San es uno de los mayores equipos neurológicos y neuroquirúrgicos de todos los hospitales privados de Nueva Gales del Sur”, dijo Brett Goods, consejero delegado de Adventist HealthCare.
“Además, nuestro CNC de derrames cerebrales, enfermería y profesionales sanitarios aliados desempeñan un papel fundamental en la atención que proporcionamos a los pacientes con derrames cerebrales siguiendo vías clínicas estandarizadas para garantizar que los pacientes reciban el tratamiento oportuno. El San tiene la suerte de contar con un equipo sanitario dedicado que contribuye decisivamente a proporcionar cuidados críticos y a mejorar los resultados de los pacientes en los momentos de mayor necesidad”, declaró Goods.
Y añadió: “Estamos encantados con este reconocimiento a la excelente calidad de la atención que nuestro equipo presta a los pacientes con derrame cerebrovascular”.
El artículo original se publicó en el sitio de noticias de la División del Pacífico Sur, Adventist Record.