La información personal no se vio afectada; se está investigando el hecho
La sede central de la Iglesia Adventista del Séptimo Día ha sido víctima de un robo informático que estafó a la iglesia sustrayéndole aproximadamente medio millón de dólares. El robo afectó a fondos que estaban siendo transferidos a una entidad de la denominación.
Los directivos de la iglesia están cooperando con las autoridades en la investigación en curso. Al mismo tiempo, están trabajando con los bancos y las compañías aseguradoras para determinar qué cantidad de ese monto se podría recuperar. Aunque por el momento no puede ser descartada, no existen indicaciones de que haya existido alguna participación de alguno de los empleados de la sede central.
“En este delito, no se ha visto afectada ni se ha tenido acceso a la información personal de las personas, tales como los datos personales, los registros personales de donantes o las cuentas internas”, aseguró Bob Lemon, tesorero de la denominación. “Estamos modificando los procedimientos para asegurarnos de hacer lo mejor para que esto no vuelva a suceder”.
La feligresía de la Iglesia Adventista del Séptimo Día alcanzó oficialmente los 18 millones de miembros el mes pasado. La denominación se encuentra presente en más de doscientos países.