La primera Convención de Outpost International Centre de China (OCI), celebrada del 10 al 14 de julio de 2024 en el Aenon Health Care de Tampin, Negeri Sembilan, reunió a 300 personas de todo el mundo con una misión común: inspirar, conectar y apoyar a los ministerios independientes de todo el mundo. El evento ofreció a los asistentes una plataforma para explorar profundos conocimientos espirituales y fortalecer su relación con Cristo por medio de sesiones alentadoras.
OCI (Outpost Centers International) es una red mundial de ministerios laicos dedicados a promover la misión de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Al conectar y nutrir a cientos de ministerios de apoyo en todo el mundo, OCI desempeña un papel vital en la difusión organizada del Evangelio, movilizando a los laicos para que compartan activamente el mensaje adventista en diversas comunidades.
Pavel Goia, editor de la revista Ministry y secretario ministerial asociado de la Asociación General (AG), dirigió una serie de conmovedoras sesiones para inaugurar la convención. Goia hizo hincapié en la importancia de priorizar el amor genuino a Jesús. La sesión de apertura, “¿Amas a Jesús?”, instó a los participantes a examinar su compromiso con Cristo, destacando los peligros de permitir que los apegos materiales obstaculicen el crecimiento espiritual.
En la sesión siguiente, Goia abordó las formas sutiles en que las distracciones pueden desviar a los creyentes de su enfoque espiritual. Pidió un renovado sentido de urgencia en la preparación para el regreso de Cristo, subrayando que ahora es el momento de establecer prioridades alineadas con el propósito divino.
Se profundizó en el tema de la entrega total a Dios, ya que la sesión desafió a los asistentes a ir más allá de la búsqueda de bendiciones y a centrarse en profundizar en su relación con Dios. El pastor Goia hizo hincapié en que la verdadera transformación espiritual solamente puede producirse cuando los creyentes se comprometen plenamente a servir a los demás y a hacer de Dios su principal tesoro.
Goia también advirtió de los riesgos de la complacencia espiritual. Estableció paralelismos entre los creyentes modernos y los discípulos de Getsemaní, e instó a los asistentes a mantener una comunión constante con Dios por medio de la oración y el servicio activo. La sesión sirvió de llamada de atención para quienes se limitan a seguir los movimientos de la fe sin comprometerse verdaderamente con la presencia de Cristo.
El programa se centró en la importancia de la adoración diaria y la obediencia a la guía de Dios. Se recordó a los participantes que el éxito en los esfuerzos espirituales requiere un enfoque firme en la presencia de Dios y la voluntad de seguir sus mandamientos, incluso cuando desafían la comprensión convencional.
Los talleres dirigidos por ponentes de renombre realzaron aún más la convención. En ellos se trataron temas como las relaciones familiares, la educación, el ministerio personal y el liderazgo. Estas sesiones aportaron ideas y estrategias prácticas para aplicar los principios espirituales en diversos aspectos de la vida y el ministerio.
El evento brindó a los delegados la oportunidad de compartir sus historias mediante impactantes testimonios el sábado por la tarde. Ministerios independientes de todo el mundo compartieron sus experiencias, ofreciendo una visión conmovedora de cómo Dios está obrando por medio de diversas iniciativas. Esta sesión, junto con las contribuciones del Dr. Dosung Kim, presidente de campo de la OCI para Sudamérica, quien compartió sobre el trabajo en Bolivia, sirvió para inspirar a los participantes a comprometerse aún más con la causa de Dios.
La Convención 2024 de OCI concluyó con una nota alta. Los asistentes se fueron con un compromiso renovado para avanzar en la obra de Dios. El mensaje final de Goia de “seguir adelante por la causa de Dios porque Dios está con nosotros” resonó profundamente, marcando la pauta para futuros esfuerzos en el ministerio global.
Aunque aún no se ha concretado la fecha de la próxima convención, se espera que tenga lugar a finales de julio o principios de agosto de 2025. Se anima a los asistentes a marcar sus calendarios y prepararse para otra oportunidad de unirse en la misión de inspirar, conectar y apoyar los ministerios globales.
Esta Convención inaugural de OCI en China ha establecido un alto estándar para futuras reuniones, demostrando el poder de la unidad y el propósito compartido en el avance del reino de Dios.
El artículo original está publicado en el sitio web de la División Sudasiática del Pacífico.