Northern Asia-Pacific Division

Celebraciones bautismales en la Sección Norte de Pakistán

La comunidad adventista celebra que decenas de jovencitos abracen la fe en un servicio bautismal.

Los niños se hacen una foto de grupo con sus diplomas.

Los niños se hacen una foto de grupo con sus diplomas.

[Foto: División Norasiática del Pacífico]

La Sección Norte de Pakistán celebró una ceremonia bautismal, marcando un hito significativo para 13 jovencitos de la Escuela Sabática que aceptaron a Jesucristo como su Salvador personal. Esta ocasión siguió a una clase bautismal impartida por el departamento del Ministerio del Niño de la Unión de Pakistán (UPK), subrayando la dedicación del departamento a nutrir la fe de los jóvenes. El mismo día, durante el sábado en el Distrito de Lahore, tuvo lugar otra celebración bautismal, en la que 23 jovencitos de la escuela sabática aceptaron a Jesucristo como su Salvador personal, sumándose a la celebración de la comunidad. “A Dios sea toda la gloria” resonó en el corazón de los asistentes, reflejando su profunda gratitud por este hito divino.

Farzan Yakub, director del Ministerio del Niño de la UPK, ofreció orientación y seminarios esenciales por medio de los temas “Los padres como guía” y “Primero Dios”, ayudando a los padres a enseñar a sus hijos a ser fieles mayordomos a medida que crecen en su caminar con Dios. Enseñar a los hijos a ser fieles a Dios implica alimentar su crecimiento espiritual mediante la oración, el estudio de la Biblia y el ejemplo. Incentiva debates abiertos acerca la fe, comparte historias del amor de Dios y haz hincapié en la importancia de confiar en él. Los niños aprenden a desarrollar una fe profunda y duradera, fomentando un ambiente de amor y apoyo”.

Veintitrés jovencitos de la Escuela Sabática aceptan a Jesucristo como su Salvador personal.
Veintitrés jovencitos de la Escuela Sabática aceptan a Jesucristo como su Salvador personal.

Raquel Arrais, directora del Ministerio del Niño de la División Norasiática del Pacífico, dijo: “Alabado sea Dios por la notable bendición de 13 jovencitos que aceptan a Jesús por medio del bautismo. Esta ocasión es un testamento de su gracia y amor sin fin. Que su vida se llene de su sabiduría y luz a medida que crecen en su relación con él. Regocijémonos en este hito divino, sabiendo que el Cielo celebra junto a nosotros y continúa apoyando y nutriendo a estos jóvenes creyentes”.

El artículo original se publicó en el sitio web de la División Norasiática del Pacífico.

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