Aviación Mundial Adventista (AMA) está proporcionando ayuda crítica tras el huracán Helene, entregando suministros esenciales y apoyo espiritual a las comunidades aisladas a lo largo de Florida y el sureste de EE. UU. Con más de 200 horas de vuelo registradas, los pilotos voluntarios de AMA están ayudando a los esfuerzos de recuperación mediante el transporte de alimentos, agua, ayuda médica, y más a los necesitados.
Tras el catastrófico huracán Helene, que devastó el sureste de Estados Unidos, Aviación Mundial Adventista (AMA) ha desempeñado un papel crucial en la entrega de ayuda a las comunidades afectadas. Aunque AMA es un ministerio de apoyo de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, opera de forma independiente y no es propiedad ni está controlada por la Iglesia. Movilizando su flota de aviones y pilotos voluntarios, AMA ha proporcionado suministros esenciales a zonas de Florida, Carolina del Norte y más allá, reflejando su misión de llevar ayuda física y espiritual a los necesitados.
El huracán Helene tocó tierra el 26 de septiembre de 2024 en la región del Big Bend de Florida como una tormenta de categoría 4, con vientos que alcanzaban los 225 kilómetros por hora. Esta poderosa tormenta se convirtió rápidamente en uno de los huracanes más mortíferos que han azotado Estados Unidos desde Katrina, con más de 230 víctimas mortales confirmadas. La destructiva trayectoria de Helene se extendió desde Florida hasta Georgia, las Carolinas, Virginia y Tennessee, causando grandes inundaciones y daños en todos estos estados. La tormenta se debilitó a medida que avanzaba hacia el interior, pero no sin antes dejar un rastro de devastación.
Esfuerzos de ayuda de AMA
Aviación Mundial Adventista ha sido parte integral de los esfuerzos de ayuda, proporcionando transporte aéreo crucial de suministros a zonas que de otro modo serían inaccesibles. Más de 200 horas de vuelo han sido registradas por los pilotos de AMA (muchos de los cuales son voluntarios y algunos no son miembros de la iglesia) entregando suministros tales como alimentos, agua, fórmula para bebés, productos enlatados, insulina e incluso generadores. Estos vuelos han llegado a comunidades aisladas de Carolina del Norte, Tennessee y Carolina del Sur, como Banner Elk, Franklin y el condado de Pickens.
Aunque la ayuda física proporcionada por AMA ha sido crucial, su trabajo ha tenido un impacto espiritual igualmente profundo. Al aterrizar en las zonas afectadas, los pilotos de AMA son recibidos a menudo por lugareños que buscan apoyo espiritual y esperanza. Esto ha abierto oportunidades para compartir el mensaje adventista y ofrecer consuelo en medio de la crisis. El personal de AMA ha destacado las profundas conexiones que se forman durante estas misiones, no solamente con las comunidades a las que sirven, sino también entre los voluntarios y el personal, que se describen a sí mismos como "una gran familia" unida por su misión.
Las iglesias de la región han desempeñado un papel clave, acogiendo a AMA y organizando esfuerzos adicionales de voluntarios y donaciones de las congregaciones locales. El trabajo de AMA se ha destacado en varias visitas a iglesias, animando a las comunidades a apoyar los esfuerzos en curso mediante la oración y las contribuciones.
Además de la ayuda sobre el terreno, la presencia de AMA en las redes sociales ha aumentado durante este tiempo. Las actualizaciones de la organización en plataformas como Facebook e Instagram han llamado mucho la atención, con seguidores que siguen el progreso de los vuelos de ayuda y contribuyen a la causa.
Apoyo continuo
AMA, que funciona enteramente con donaciones, depende de la generosidad de sus seguidores para continuar con sus misiones humanitarias. Su labor tras el huracán Helene es un testimonio del poder de la fe y el servicio en tiempos de necesidad. Para contribuir a sus esfuerzos, visita su página de donaciones.
Además de la Aviación Mundial Adventista (AMA), la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales(ADRA) y el Servicio Comunitario Adventista (SCA) están muy implicados en los esfuerzos de ayuda a los afectados por el huracán Helene. ADRA ha proporcionado 150.000 dólares al SCA para los esfuerzos de recuperación en todo el sureste de EE. UU., incluyendo Asheville, Carolina del Norte y Georgia. También han entregado lámparas solares para ayudar en las regiones sin electricidad. Juntos, estos ministerios están distribuyendo suministros vitales como alimentos, agua y kits de higiene. Las donaciones pueden hacerse por medio de ADRA y el SCA.
Estos esfuerzos combinados muestran la amplitud del compromiso de la Iglesia Adventista para ayudar a los afectados por el huracán Helene, proporcionando apoyo inmediato y a largo plazo a las comunidades afectadas.
Para más información respecto a los esfuerzos en curso y las actualizaciones de AWA, síguelos en Facebook o Instagram.