La Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) de Corea del Sur se ha movilizado rápidamente tras el trágico accidente del vuelo 7C2216 de Jeju Air, que se cobró la vida de 179 personas. A raíz de esta devastadora tragedia, ADRA está proporcionando apoyo crítico a las familias en duelo y ayudando a los esfuerzos de recuperación en el Aeropuerto Internacional de Muan y sus alrededores.
El 29 de diciembre de 2024, el avión de pasajeros que viajaba de Bangkok a Muan se estrelló trágicamente durante su aproximación final, provocando uno de los desastres más desgarradores de la historia reciente de la región. Entre las víctimas había miembros de la comunidad adventista, incluidos padres y alumnos de la escuela adventista Sahmyook, lo que agravó el dolor de las iglesias y escuelas adventistas locales.
Respuesta inmediata de ADRA y voluntarios
En respuesta a la abrumadora tragedia, la filial de ADRA en Honam instaló un puesto de socorro en el Aeropuerto Internacional de Muan el día del accidente para ofrecer un punto de contacto compasivo y ayudar a las familias de las víctimas, a los equipos de emergencia y a los voluntarios.
Los esfuerzos de socorro han unido en la compasión a comunidades de todo el país. Miembros de la Iglesia Adventista, jóvenes de clubes de Conquistadores de distintas partes del país y profesores del Colegio Adventista que perdieron alumnos y padres en la tragedia, unieron sus fuerzas a las de ADRA para llevar esperanza, consuelo y ayuda práctica a las familias en duelo.
Con el apoyo de los recursos de la Iglesia Adventista, ADRA y más de 200 voluntarios ayudaron a preparar y servir 500 almuerzos, distribuir aperitivos como mandarinas, plátanos, pan y leche de soja, y proporcionar suministros para el clima frío y las necesidades diarias como artículos de tocador, mascarillas, toallitas húmedas, medicamentos y calcetines.
En una declaración a los medios adventistas, Choi Gyu-sik, director de la filial de ADRA en Honam, expresó su sincera gratitud a los voluntarios que viajaron desde todo el país para participar en las tareas de socorro, así como a los que han donado generosamente bienes y fondos. También hizo hincapié en la necesidad de seguir prestando ayuda.
"Estamos debatiendo constantemente la mejor manera de apoyar a las familias y a los voluntarios en las próximas semanas. Haremos todo lo posible para ajustar los horarios de los voluntarios y la distribución de suministros según sea necesario, asegurándonos de que el amor de Cristo llegue a los más afectados por esta tragedia", declaró Choi.
Llamado a la oración y al apoyo continuados
ADRA, los líderes de la iglesia y el presidente de la Iglesia Adventista Mundial del Séptimo Día, Ted N. C. Wilson, instan a la comunidad mundial a orar y extender su apoyo durante este tiempo de profunda pérdida.
"La Iglesia Adventista de Corea del Sur se ha visto profundamente conmocionada por esta trágica pérdida de vidas", dijo Wilson. "Extendemos nuestras sentidas condolencias y amor cristiano a las familias que han perdido a sus seres queridos, tanto dentro de la comunidad adventista como fuera de ella. Que el Consolador esté especialmente cerca de ustedes ahora, mientras esperamos con esperanza el pronto regreso de Cristo", declaró Wilson.
"Mientras lloramos junto a nuestros hermanos y hermanas de Corea, insto a nuestra familia eclesiástica mundial a elevar en oración a todos los que han sufrido esta pérdida inimaginable. También oremos por fortaleza y sabiduría para aquellos que están atendiendo a las familias en duelo durante este tiempo increíblemente oscuro. Ven pronto, Señor Jesús".
Continúan los esfuerzos de llevar alivio y esperanza
Mientras la comunidad en duelo lidia con esta tragedia desgarradora, ADRA se mantiene firme en su compromiso de asegurar que ninguna familia se quede sin el apoyo que necesita, especialmente durante los difíciles días previos a los servicios funerarios para sus seres queridos. Este es solamente un ejemplo de la sanación y la esperanza que ADRA aporta a las comunidades de todo el mundo cuando se recuperan de las catástrofes. Con su generosa donación, ADRA puede tener un impacto duradero en los más necesitados, tanto en Corea del Sur como en el resto del mundo, donde las catástrofes golpean a diario. ADRA está ahí para proporcionar la compasión, la atención y la asistencia práctica necesarias para ayudar a reconstruir vidas tras una tragedia.
El artículo original se publicó en el sitio web de ADRA Internacional.