La Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) está intensificando los esfuerzos de recuperación humanitaria en El Salvador, con el objetivo de ayudar a cientos de residentes afectados por la tormenta tropical Julia.

A pesar de que pasó de ser un huracán de categoría 1 a una tormenta tropical, Julia asoló Centroamérica cuando tocó tierra el 9 de octubre. Golpeó la región, provocando inundaciones mortales y desplazamientos de tierra, matando al menos a 54 personas y dejando a miles de personas sin hogar, según la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCHA).

Las autoridades locales de El Salvador han declarado el estado de emergencia por 15 días para facilitar las operaciones de respuesta y recuperación. La oficina de ADRA en El Salvador ya ha lanzado su Plan Nacional de Manejo de Emergencias (NEMP) para movilizar la ayuda inmediata.

“Las comunidades ya han sido devastadas por las excesivas lluvias torrenciales causadas por los cambios climáticos anteriores a Julia. Las inundaciones masivas de la tormenta han afectado a las familias en los 14 departamentos de la nación. Los ríos y los arroyos desbordados han interrumpido la comunicación de vecindarios enteros. ADRA está trabajando con los municipios locales y la Iglesia Adventista para ayudar a las familias y los niños desplazados. Estamos distribuyendo alimentos, agua y artículos de higiene, así como asistencia financiera a algunas de las comunidades más vulnerables”, dice Alex Figueroa, director nacional de ADRA El Salvador.

La tormenta también interrumpió las actividades del sector pesquero y causó daños catastróficos a las cosechas de maíz y frijol, con parcelas completamente sumergidas, según informes de evaluación. Los equipos de respuesta de emergencia de ADRA en Centroamérica seguirán monitoreando la situación actual en El Salvador y otros países afectados por la tormenta y las fuertes lluvias, incluyendo Guatemala y Honduras, para continuar ayudando a las comunidades locales.

Acerca de ADRA

La Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales es el organismo humanitario internacional de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, que sirve en 118 países. Su trabajo capacita a las comunidades y cambia vidas en todo el mundo al ofrecer desarrollo comunitario sostenible y socorro en casos de desastre. El propósito de ADRA es servir a la humanidad para que todos puedan vivir de la manera en que Dios lo estableció. Para obtener más información, visite ADRA.org.

El artículo original se publicó en el sitio web de la División Interamericana.