Una profesora de escuela adventista ha sido galardonada con la Beca Adventista de Accesibilidad (AAS, por sus siglas en inglés) por su dedicación a mejorar la accesibilidad dentro de la iglesia y la comunidad.
Jenaya Lewis, profesora del Colegio Cristiano Noosa de Queensland, recibió la beca para completar el Certificado III en Auslan con Deaf Connect.
AAS es una iniciativa de Christian Services for the Blind and Hearing Impaired (CSFBHI [Servicios Cristianos para Ciegos y Deficientes Auditivos ]), un ministerio de Adventist Media en Wahroonga, Nueva Gales del Sur. Anteriormente llamada Beca de Investigación y Capacitación Personal, AAS recibió un nuevo nombre y un objetivo revisado en 2023: apoyar financieramente a las personas dedicadas a contribuir a la vida de aquellos que son sordos o tienen pérdida de visión o audición, lo que afecta su acceso a los programas y recursos de la comunidad adventista.
“Creemos que los becarios pueden ayudar a crear una iglesia adventista más accesible e inclusiva”, dijo Coralie Schofield, coordinadora de CSFBHI. “Nos encantaría ver un aumento de lo que podemos ofrecer actualmente, y asociarnos con los becarios es una forma de hacerlo”, añadió.
Lewis es la primera beneficiaria de la beca actualizada. Desde muy joven se interesó por la comunicación con la comunidad sorda. Aprendió la lengua de signos de su padre, que solía ofrecer apoyo en los campamentos para sordos, una parte importante de la comunidad sorda en Australia durante la década de 1990.
Mientras estudiaba Magisterio en la Universidad de Avondale, Lewis fue colíder de un Grupo de Vida, en el que enseñaba la lengua de signos australiana (Auslan) básica para que la comunidad de la iglesia pudiera conectar con la comunidad sorda. Ahora que vive y trabaja en Queensland, colaboró con CSFBHI para facilitar talleres de Auslan por primera vez en el Gran Campamento de la Asociación del Sur de Queensland en octubre de 2023. También interpretó algunos de los programas para los asistentes sordos.
La intención de Lewis en un futuro próximo es reiniciar los campamentos para sordos, especialmente para niños. “Me encantaría reanudarlos para ayudar a la gente, pero también porque sería una gran oportunidad de evangelización para nuestra iglesia”, dijo.
Según DOOR International, los sordos son el mayor grupo de personas no alcanzadas del mundo. Wayne Boehm, director del Adventist Media Discovery Centre, atribuye las estadísticas a que la comunidad sorda es un área de ministerio a menudo olvidada. “La gente lucha con problemas de audición a todas las edades, lo que afecta significativamente a la capacidad de una persona para escuchar la Palabra de Dios”, dijo Boehm.
En Australia, se calcula que una de cada seis personas sufre algún grado de pérdida de audición y 357.000 son ciegas o visión disminuida. Al ofrecer la beca de accesibilidad, CSFBHI espera animar a más miembros de iglesia a crear un mejor acceso a los recursos y programas adventistas para sordos o personas con pérdida de visión o audición.
“El último becario recibió ayuda para aprender la lengua de signos. Pero otros ejemplos podrían incluir el diseño de accesibilidad para sitios web o materiales impresos, o tal vez aprender cómo convertir texto a braille o incluso cómo crear y narrar audiolibros”, dijo Schofield.
El artículo original se publicó en el sitio de noticias de la División del Pacífico Sur, Adventist Record.