Desde hace 15 años, el Proyecto Bálsamo ofrece consuelo y esperanza a las familias en duelo de todo Brasil. En Amazonas, la iniciativa tiene lugar anualmente el 2 de noviembre, cuando decenas de grupos de jóvenes, adolescentes y mujeres se dedican a brindar apoyo a las personas que visitan las tumbas de sus seres queridos.
“Es la primera vez que vengo y es gratificante llevar la solidaridad a la gente. Es una forma de misión, de llevar el amor de Dios a los que han perdido a un ser querido. El Proyecto Bálsamo es exactamente eso: compartir el amor”, explica Viviane Moreira, que participó en la acción en el Cementerio Parque Tarumã, en Manaus, junto con el Club de Conquistadores Águas de Merom .
En 2024, un grupo de 40 voluntarios organizó un proyecto para atender el Cementerio São João Batista, en el centro de Manaus. La iniciativa incluyó la distribución de agua, libros misioneros y folletos sobre el tema de la muerte. Además, el coro de la iglesia actuó, lo que, según el organizador del proyecto, Roger Becali, fue un punto culminante del esfuerzo. “Dividimos el equipo en cuatro grupos, y las actuaciones del coro destacan porque sorprenden a la gente y crean oportunidades para que hablemos de Jesús”, explica.
La iniciativa forma parte del calendario anual de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Además de los cementerios de São João Batista, Parque Tarumã, Nossa Senhora de Aparecida, Santa Helena y el cementerio indígena, el proyecto también se lleva a cabo en varios municipios de Amazonas, como Parintins, Maués, Itacoatiara, Rio Preto da Eva y Barreirinha.
Consolación
Muchos expresaron su gratitud al recibir la atención y el apoyo de los voluntarios. “Este es un día difícil. Siempre recuerdo a mi padre con tristeza, y vengo aquí con el corazón encogido. Recibir afecto de alguien que ni siquiera conozco es especial. Es como si Dios cuidara de mí”, dice la alumna Marília Bentes.
Alumnos del Colegio Adventista Paul Bernard también se unieron al proyecto. Al participar por primera vez, los estudiantes de secundaria quedaron impactados por las reacciones de la gente. “Se animaron a vivir un poco de solidaridad en la práctica, y fue una experiencia muy positiva. Salieron de la acción valorando aún más los momentos en familia”, destaca el profesor Hugo Oliveira.
El artículo original se publicó en el sitio web en portugués de la División Sudamericana.