La acogida de voluntarios siempre ha formado parte de la historia de la Misión de Albania. La tradición continuó este año con la llegada de siete voluntarios que prestan servicio en iglesias y zonas de todo el país. Desempeñando papeles cruciales en actividades infantiles, proyectos de comunicación e iniciativas comunitarias locales, cuatro de los siete voluntarios se encuentran actualmente en Albania procedentes de Brasil mediante el proyecto Un Año en Misión y Servicio (OYIMS). Los grupos enviados por la Asociación Sur Paranaense (ASP) forman parte de una iniciativa mundial de Jóvenes, cuyo objetivo es enviar equipos de jóvenes de todo el mundo para llevar a cabo actividades de voluntariado. Esta es la primera vez que la ASP envía voluntarios al extranjero.
Jairo Souza, director de Jóvenes de la ASP y coordinador de OYIMS, explica que el envío de jóvenes brasileños al exterior es un acto de gratitud, ya que la Iglesia Adventista en Brasil históricamente ha recibido mucho apoyo de los misioneros. “Estamos muy agradecidos por lo que ellos hicieron por nosotros, y sentimos la necesidad de seguir su ejemplo al ayudar a otras regiones del mundo”, dijo. También señaló que este año se cumplen 150 años del envío de John Nevins Andrews a Europa, por lo que resulta especialmente significativo enviar voluntarios a un país europeo dentro de la ventana 10/40, donde existen muchos desafíos para predicar y compartir el Evangelio.
Valentina Weck, una de las voluntarias, dijo que ir de misionera al extranjero es un sueño hecho realidad: “Estoy segura de que fue Dios quien puso Albania en mi corazón. Hoy veo que no podría estar en otro sitio este año”. Entre los demás voluntarios, uno trabaja para la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) en Albania como profesor de inglés en la guardería adventista de Tirana. Los demás participan en el proyecto “Juventud Viva” de la Asociación General en la ciudad de Korçë, trabajando con adolescentes y jóvenes adultos, y ayudando también en el departamento de comunicación y en otras necesidades de la iglesia local.
Una misión transformadora
Antes del proyecto OYIMS de este año, durante el otoño de 2023, un equipo de voluntarios viajó a través del océano desde Brasil hasta Albania, aportando su dedicación, habilidades y apoyo financiero para llevar a cabo una labor transformadora. Este grupo de 35 empleados de la ASP llegó con una misión clara: la renovación completa de la iglesia de Durrës. La misión emprendida por este grupo ejemplificó el importante impacto de la colaboración internacional. Con herramientas en mano y el corazón lleno de buena voluntad, dedicaron su tiempo y sus esfuerzos a renovar la iglesia, convirtiéndola en un espacio más acogedor y funcional para la comunidad local.
La presencia de los voluntarios tuvo un efecto positivo y duradero tanto en la iglesia como en la comunidad de Durrës. La renovación mejoró las infraestructuras y revitalizó el espíritu de la congregación, creando un ambiente renovado y motivador. Marko Frashëri, pastor de la congregación de Durrës, explicó, con el corazón agradecido: “La llegada del grupo fue una gran bendición para la iglesia de Durrës. La innovación aportada por el grupo brasileño hizo que la iglesia tuviera un aspecto asombroso y proporcionó inspiración y esperanza a los miembros”. Delmar Reis, presidente de la Misión de Albania, añadió además: “Estos voluntarios aportan motivación y ganas de servir allí donde se los necesite. Es el intercambio de experiencias entre voluntarios y locales lo que hace que esta oportunidad sea transformadora”.
El trabajo de los voluntarios, tanto locales como internacionales, en colaboración con los miembros locales, es crucial para que la Misión de Albania prospere. Las historias de los siete voluntarios actuales, los 35 que sirvieron el año pasado y muchos otros antes que ellos ponen de relieve el impacto positivo que se consigue cuando las personas se unen en espíritu de servicio y solidaridad por Cristo y su reino.
El artículo original se publicó en el sitio web de la División Transeuropea.