El 12 de agosto, último día completo de la Convención Europea 2023 de GYC (Generation. Youth. Christ. [Generación. Jóvenes. Cristo]) en Riga (Letonia), incluyó música especial y cantos congregacionales, estudio bíblico en pequeños grupos, un mensaje espiritual con un llamado a la acción y amplias oportunidades para participar en actividades de evangelización y servicio. Cientos de jóvenes abandonaron el Centro ATTA después del almuerzo para unirse a los grupos que fueron trasladados en autobús al centro de la ciudad para diversas iniciativas de evangelización.

El día comenzó temprano con grupos de oración y cantos. Justin Kim, editor ejecutivo de la Adventist Review, coordinó un panel y pequeños grupos durante la revisión de la lección de la Escuela Sabática del 12 de agosto. El panel incluyó a miembros de GYC de Austria, Bélgica y otros países.

Un coro de la iglesia local cantó en letón. El director del coro es Mārtinš Subatovičs, pastor de la Iglesia Adventista del Séptimo Día de Riga Central. Subatovičs, quien fue el orador devocional de la mañana durante la conferencia, también tiene formación como director de coro y musicoterapeuta.

[Fotos: Marcos Paseggi, Adventist Review]

LLENOS DEL ESPÍRITU PARA SERVIR

Pavel Goia fue el orador del programa de culto del sábado, que incluyó la visita de miembros de las iglesias adventistas de la zona de Riga. Goia, director asociado de la Asociación Ministerial de la Asociación General y editor de la revista Ministry, hizo un llamado a los miembros de GYC para que confíen en el poder de la oración ferviente, estén verdaderamente comprometidos con Dios, y luego salgan a servirlo al compartir a Cristo con los demás.

“Dios los ha llamado al servicio”, dijo Goia a la multitud reunida en el Centro ATTA. “Los ha llamado a ser una luz para este mundo”, pero ¿cómo hacerlo? “Al ser llenos del Espíritu, al ser bautizados por el Espíritu Santo”.

La presencia del Espíritu es clave, subrayó Goia. “El Espíritu te lleva a todo el proceso de conversión o justificación, luego de crecimiento o santificación, y finalmente de salvación o glorificación”, dijo. “Te lleva del bautismo al cielo; sin el Espíritu, nunca podrás pasar por ese proceso”.

Goia explicó el proceso compartiendo algunos ejemplos comunes. “No basta con tirarse al agua [para nadar]; hay que salir del agua; no basta con ir a la escuela; hay que graduarse; no basta con casarse; hay que permanecer casado y crecer en el amor”. A continuación, insistió en su punto de vista espiritual: “No basta con salir de Egipto; hay que cruzar el desierto y llegar a la Tierra Prometida; no basta con ser bautizado; hay que pasar de ser un bebé a la plenitud de la estatura de Cristo”.

[Fotos: Marcos Paseggi, Adventist Review]

CITAS DIVINAS

Las actividades de evangelización del sábado por la tarde incluyeron el encuentro con la gente de Riga y la distribución de libros en las calles y parques de la ciudad. Durante el programa vespertino, varios miembros de GYC compartieron con los transeúntes algunos de los que denominaron contactos providenciales. Entre ellos, un hombre que se aburría en casa viendo la televisión y decidió visitar el mercado. Mientras caminaba por el mercado, oyó cantos y fue a ver qué pasaba. Los miembros de GYC hablaron con él de temas bíblicos y lo invitaron a una iglesia local.

“Creo que Dios quería que estuviera aquí”, les dijo el hombre al final, mientras prometía visitar una iglesia adventista local en Riga.

Para los miembros de GYC, fue una respuesta directa a sus oraciones. “Para mí, fue conmovedor”, dijo una de las jóvenes que habló con él con la ayuda de un intérprete letón. “Simplemente, demostró que todas las oraciones que hicimos antes de salir, Dios las respondió fielmente”. Esto salió directamente de la boca de este hombre. Y para mí fue maravilloso oírlo y muy, muy alentador”.

“Hoy es un día feliz”, dijo un joven miembro letón de GYC. “Siempre es un día feliz cuando un alma se acerca a Dios”. Contó cómo, mientras caminaba, uno de los libros que llevaba se cayó al suelo, pero él no se dio cuenta. Cuatro mujeres que vieron el libro corrieron tras él.

–Este es tu libro –le dijeron.

–¡Oh, gracias! –les dijo el joven–. Pero ahora este libro es de ustedes.

Eso desencadenó una conversación que acabó con las cuatro mujeres llevándose un ejemplar tanto de El camino a Cristo como de El gran conflicto. “Y todo empezó porque uno de mis libros cayó por accidente... bueno, no fue un accidente”, dijo el joven.

Un tercer joven compartió otro encuentro providencial. “Estaba en una caminata de oración, pidiéndole a Dios que nos diera citas divinas”, dijo. Mientras caminaba, se encontró con un hombre en un scooter y se sintió impresionada A hablar con él. Lo saludó y le dio un folleto.

“Esto es religioso”, le dijo el joven. “Solía ir a la iglesia”. Cuando ella le preguntó a qué iglesia solía asistir, él respondió: “Adventista del Séptimo Día”.

Su reconocimiento desencadenó una conversación en la que compartió una historia de angustia y resentimiento familiar. Su madre lo obligaba a ir a la iglesia, pero luego lo abandonó, se volvió a casar y ahora vive en otro continente. Conteniendo las lágrimas, hablaron de la importancia del perdón.

–¿Es posible perdonar? –preguntó el joven a la miembro de GYC.

–Lo es –respondió ella– porque Dios nos ha perdonado.

Después de leer la Biblia, la joven dijo que percibió al Espíritu Santo obrando en el corazón del exadventista.

“Se emocionó mucho”, dijo la joven. “Oramos juntos y, después de eso, me dijo: ‘Esto no es una coincidencia’. ‘No’, le dije. Es una cita divina”.

Ver a Dios obrando por medio de ellos fue alentador para los miembros de GYC que participaron en la actividad de la tarde.

“Solo quiero dar gracias a Dios”, dijo un joven participante. “[Él nos ayudó] a llegar a los que lo están buscando”.

La versión original de esta noticia fue publicada en el sitio web de la Adventist Review.